Día de la Bandera: el verdadero color de la primera insignia patria

Investigadores de la UNLP lograron determinar el color original de la denominada Bandera de Macha.

Interés General

20/06/2024 - 00:00hs

En febrero de 1812, a orillas del río Paraná, el general Manuel Belgrano izó por primera vez la bandera argentina. Sin embargo, sus colores son todavía motivo de polémicas entre los historiadores.

Investigadores de la UNLP realizaron años atrás un estudio sobre su color original y determinaron que se utilizó el azul índigo en combinación con el blanco.

La primera bandera argentina de la historia no es de guerra sino de ceremonia, mide 2,25 x 1,60 m., y no es blanca y celeste como se enseña en las escuelas. Fue confeccionada en 1812 en un tipo de seda que se corresponde con un tafetán utilizado a principios del siglo XIX, y está guardada en la Casa de la Libertad de Sucre, Bolivia.

En 1813, el párroco de la capilla de Titiri, ubicada en Macha (Bolivia), recibió la bandera conocida como “Bandera de Macha” de manos de Cornelio Zelaya, un coronel del ejército de Manuel Belgrano, y la guardó detrás de un cuadro de Santa teresa para mantenerla a salvo.

“Ese mismo color azul coincide con el de la Bandera de Ayohúma (2,32 m de largo por 1,53 m de alto), hermana de la Bandera de Macha que se conserva en el Museo Histórico Nacional. La única diferencia entre ambas, es que la de Macha tiene una franja azul en el centro y franjas blancas arriba y abajo; mientras que la de Ayohúma tiene dos franjas azules y una blanca en el centro”, remarca el Dr. Carlos Della Védova, profesor Titular de Química Inorgánica de la Facultad de Ciencias Exactas de la UNLP, quien llevó adelante la investigación “La fuente del color de las primeras banderas argentinas”. El equipo de trabajo también está compuesto por la doctora Rosara Romano y Lorena Picone.

En la investigación se hizo hincapié sobre el origen del color azul. Los investigadores platenses descubrieron que ese azul era proveniente de un colorante índigo que a principios del siglo XIX tenía dos orígenes. Uno venía de Europa, por lo general de Amiens. Era de una especie llamada isatis tinctoria. La otra, procedente de Asia, era el indigófera tinctoria. “Cada una de estas plantas da índigo, pero la composición de sus colorantes es diferente”, explica Della Védova.

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