Cómo nos informamos y las fake news
Los argentinos recurren fundamentalmente a las redes sociales para acceder a la información.
El Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional 24 de Capital Federal resolvió que el periodista deberá resarcirse por sus dichos con respecto al exmarino Julio César Urien, preso en la dictadura.
11/11/2021 - 15:28hs
Durante uno de sus programas que se emiten en el canal A24, Eduardo Feinmann se refirió al exmarino Julio César Urien, quien participó de la sublevación de la ESMA en 1972 y fue secuestrado y torturado durante la dictadura cívico-militar.
Allí el periodista afirmó que Urien fue “odiado en la armada argentina”. “Como exguardia marina, el tipo mató a un cabo a sangre fría, cuando, siendo oficial de guardia de la ESMA, la quiso tomar y le pegó un balazo en la cabeza. Yo quiero recordar que, a pesar de haber sido encarcelado y después dado de baja, Néstor lo ascendió. Una cosa rarísima, rarísima. Lo ascendió dos grados a teniente de fragata, y le pagó todos los sueldos caídos de 30 años. ¿Es muy impresionante, no?”.
“Este tipo es uno de los asesores del actual Presidente electo en temas de seguridad y de Fuerzas Armadas. Actualmente, este Urien cobra un retiro, pero la verdad no es reconocido por el resto de la Armada como un camarada. Mató a uno propio, le pegó un balazo en la cabeza porque no quería entregar las armas”, continuó Feinmann.
Urien, representado por el doctor Pedro Dinani, inició una demanda ante la Justicia porteña contra el periodista por “calumnias y la divulgación de noticias falsas”.
El denunciante argumentó que “del juicio surgió claramente que Urien no fue el autor de esa muerte (por el cabo Juan Luis Contreras), pues cuando se produjo el hecho ya se encontraba detenido, lo que fue acreditado no solo con los testimonios aportados por la querella, sino también por la declaración de la testigo Victoria Eugenia Villarruel y por el sumario que la nombrada acompañó”. Dinani consideró que “el querellado obró con total desinterés por la verdad y se excedió en los límites éticos de la profesión”. “No hubo intención de informar sino calumniar”, continúa el documento del fallo.
Por su parte, el periodista, lejos del arrepentimiento, ratificó sus dichos, pero afirmó que “se trató del ejercicio del derecho constitucional a la información y de la libertad de expresión, que en algunos casos colisiona con el derecho al honor”. Además, Feinmann, representado por la letrada Ana Laura Palmucci, aseveró que “no interesa que no haya sido el autor material del homicidio, porque lo importante es que fue el autor intelectual, es decir, el cabecilla del levantamiento en el que se mató al cabo Contreras”.
“No es lo mismo acusar a alguien de ser la cabeza o de participar en un intento de motín en el que se causó la muerte de la víctima, que ser el autor del homicidio”, respondió el juez Javier de la Fuente a esta argumentación.
“No es cierto que se haya probado que Urien fue condenado efectivamente por ese intento de motín con derramamiento de sangre, pues el sumario aportado únicamente demuestra que se realizó una investigación sumarial y se efectuaron cargos contra él. No consta cuál ha sido la decisión definitiva que se adoptó con respecto al caso. El extracto termina con la formulación de los cargos, es una primera parte del sumario, y no consta la resolución final”, continúa el documento.
La resolución
Finalmente, el juez Javier de la Fuente luego de resolver que Feinmann le atribuyó a Urien “la comisión del delito de homicidio” sin haberlo probado, le ordenó al periodista pagar 30.000 pesos de multa “por ser autor del delito de calumnias”. Además, instó a la empresa América Multimedios a publicar la sentencia “en un espacio similar al programa en el que se cometió el delito”.