Rescataron un cóndor andino y lo atenderán para su recuperación
El ave será atendida en el Centro de Rescate de Temaikén.
El estudio se dio en huellas fósiles detectadas en La Rioja y confirma que varias especies de mamíferos, aves y reptiles coexistieron en tiempo y espacio justo antes de que ocurriera el Gran Intercambio Biótico Americano.
17/09/2023 - 00:00hs
Especialistas del Conicet, a partir del estudio de una asociación de huellas fósiles descubiertas en La Rioja, lograron identificar una nueva fauna de pequeños y diversos animales que existieron en un contexto donde los grandes mamíferos eran las especies dominantes, hace aproximadamente 15 millones de años atrás.
Fue en el 2013 cuando geólogos de la Universidad de Buenos Aires encontraron en La Rioja un bloque de roca con huellas fósiles. En ese entonces, se pudo distinguir solo un tipo de huella del total que hoy se conocen. Recién en el año pasado se pudo volver a investigar en la zona. “Al explorar la zona indicada por los geólogos la sorpresa fue inmediata cuando hallamos el bloque de roca caído y caímos en la cuenta de que exhibía una superficie abarrotada de pequeñas huellas”, indicaron.
Verónica Krapovickas, líder del trabajo e investigadora del Conicet, mencionó sobre el estudio: “Los nuevos hallazgos revelan que numerosas especies de mamíferos, aves y reptiles coexistieron en tiempo y espacio, justo antes de que ocurriera el Gran Intercambio Biótico Americano, un evento producido a raíz de la proximidad física entre los continentes de Norteamérica y Sudamérica, antes separados. Además, esta es la única asociación de pisadas fósiles bien definida registrada para ese período, el Mioceno Medio, hace 15 millones de años”. Según los investigadores, esta comunidad de pequeños mamíferos, aves y tortugas solía habitar las llanuras de un antiguo río.
En lo que refiere a los animales propiamente dichos, unas huellas pertenecían a pequeños mamíferos carnívoros conocidos como esparasodontes, que tenían miembros cortos y un tronco de alrededor de entre 20 y 25 centímetros de longitud, con un peso de al menos un kilo. “También descubrimos huellas dispuestas de a pares, producto de un andar saltatorio bípedo de un argirolágido, un grupo de pequeños marsupiales nativos igualmente extintos con morfología análoga a los gerbos actuales y las ratas canguro”, agregó la líder. Por otra parte, otras huellas pertenecían a una pequeña tortuga de agua dulce que no superaba los 10 centímetros de longitud. Por último, las restantes huellas pertenecían a aves costeras, a roedores gigantes emparentados con los pacaranas, y a ungulados extintos.
“En este trabajo presentamos numerosas huellas fósiles completamente desconocidas para la ciencia hasta hoy. Por un lado, la primera y más antigua evidencia de pisadas de un grupo completamente extinto de mamíferos carnívoros de América del Sur: los esparasodontes. Y por otra parte, pisadas de diminutos marsupiales extintos, conocidos como argirolágidos”, sumó Krapovickas.
El estudio también es valioso dado que aún hay poca información sobre la fauna de esta región del planeta en el Mioceno Medio. “Hay una hermosa relación recíproca entre las faunas modernas y las extintas. Las faunas del presente nos ayudan a comprender cómo era la apariencia de los animales del pasado, y las faunas extintas nos muestran las dinámicas de sus comunidades a través del tiempo y el espacio y cómo distintos factores climáticos o ambientales pudieron haberlas afectado”, cerró la experta.