Personal de una empresa tosquera encontró restos fosilizados del mamífero terrestre más grande que habitó el Pleistoceno.
En la localidad de San Pedro, Provincia de Buenos Aires, personal de la Empresa Tosquera San Pedro, de la familia Iglesias, encontró restos de un imponente animal de unas cinco toneladas de peso, cinco metros de largo y con grandes garras.
En este sentido, días atrás, el maquinista Ezequiel Giorgi y Gustavo Iglesias, propietario del lugar, se sorprendieron al ver que unos huesos enormes habían quedado expuestos por el accionar de la excavadora que trabaja en la cantera Mocoretá, a unos 5 kilómetros de la ciudad.
De inmediato, dieron aviso al equipo del Museo Paleontológico de San Pedro, quienes actuaron velozmente para evitar que se perdieran las piezas halladas.
De esta forma, José Luis Aguilar, Julio Simonini, Walter Parra, Jorge Martínez y Augusto Moleón, lograron recuperar tres arcos costales, algunas vértebras, escápulas fragmentadas y un radio completo del gran animal.
“Los megaterios (Megatherium americanum) fueron grandes perezosos terrestres, herbívoros, con un cuerpo muy masivo y una cola robusta que utilizaban como apoyo al pararse sobre sus patas traseras para alcanzar las hojas y brotes más altos. Habitaron la llanura pampeana deambulando entre pastizales y bosques que cubrían la región, casi sin depredadores. Al menos, los individuos adultos y sanos, debido a su gran tamaño”, indicaron.
Este fósil, “por provenir de un estrato cuya antigüedad ronda el millón de años, nos permite seguir la presencia de estos animales en la zona durante un tiempo muy prolongado”, comentan desde el Grupo Conservacionista de Fósiles, equipo fundador del Museo Paleontológico Fray Manuel de Torres.
Desde la Universidad Nacional de Rosario, el Dr. Luciano Brambilla, del Centro de Estudios Interdisciplinarios de la UNR y estrecho colaborador del museo de San Pedro, agregó que “los restos hallados se agregan al conjunto de fósiles de megaterios muy antiguos (de edad ensenadense) que vienen rescatándose en San Pedro. Los representantes de estos animales, con una antigüedad que ronda el millón de años, son bastante desconocidos para la ciencia, por lo que el conjunto de fósiles de San Pedro contribuirá al entendimiento de la anatomía y evolución de estos grandes animales extintos.”