Celebra el retorno del sol y encierra un profundo sentido de descolonización cultural y resistencia.
El Inti Raymi para los andinos, y el Wiñoy Xipantv para los mapuches, una fiesta milenaria que cada solsticio de invierno celebra el retorno del sol y encierra un profundo sentido de descolonización cultural y resistencia, también estará condicionada por la pandemia que envuelve al mundo.
Este año, nativos del Hemisferio Sur no podrán esperar juntos y en ceremonia, tras la noche más larga para recibir los primeros rayos del sol que marcan un nuevo comienzo.
“Wiñoy Xipantv no es año nuevo, que implica acumulación del tiempo, sino que es repetición de un ciclo. Es un cambio que nos muestra que la naturaleza se prepara para un renacimiento. Pasó el otoño y la tierra descansó. Recibe los nutrientes de las lluvias, el sol regresa y todo recomienza”, explicó desde el Puelmapu, ubicado en Neuquén, Jorge Nahuel, “logko” (autoridad política) de la significativa Confederación Mapuche neuquina.
En Bolivia, cuyo pueblo entronizó a un aymara (Evo Morales entre el 2006 y 2019) en la presidencia de la República y creó un Estado plurinacional, la celebración del Inti Raymi (Fiesta del Sol) se recuperó en los 80, cuando el racismo y la desigualdad oprimían a una mayoría indígena.