Las Pascuas solidarias de una proteccionista y el vecino de la calle 155 de Los Hornos

Norma es una vecina de Los Hornos. Desde hace más de dos años se acerca todas las mañanas para colaborar con el de­sayuno y el almuerzo de Gustavo, un hombre que decidió acampar en la vereda de la avenida 155, a metros del cruce de 66.

Desde que se inició la pandemia, la postal ha ganado protagonismo y ha despertado la solidaridad de otras personas de la zona, incluso le han ofrecido trabajos temporales en una gomería del lugar, ya que fue desalojado cuando más necesitaba protegerse de los contagios.

Allí, el domingo pasarán unas Pascuas especiales: Gustavo quiere respetar la tradición y espera que alguien le pueda donar medio kilo de filet de merluza para cocinarse, en una olla a leña (como hace todos los días), en la vereda.

Norma, en tanto, espera que otros platenses solidarios puedan adoptar a alguno de los cinco perritos que se fueron juntando alrededor de la carpa y que, si bien “cuidan” y ladran para proteger al vecino que está en situación de calle, también requieren de atención y alimentos.

“Mi rol, acá en la esquina con Gustavo, es ayudarlo con los perritos que se fueron juntando en estos dos años en la región. Les traigo alimentos y los vacuno para que puedan tener alguna protección más”, expresó la mujer que todas las mañanas, mientras sale a hacer los mandados, se detiene y dedica entre veinte minutos y media hora para dialogar con el hombre de la carpa, compartir los alimentos que tienen y les da de comer a los perros y los animales que se fueron juntando en esta esquina de Los Hornos.

Cabe recordar que, en este mismo lugar, supieron vivir el año pasado otras personas en una situación similar a la de Gustavo, pero con el correr de los meses se fueron reubicando en hogares o en otras zonas de la región.

“Yo espero que alguien se pueda solidarizar y me traiga un pescadito para poder comer hoy, Viernes Santo”, contó Gustavo, quien hace dos años vivía con otro vecino de La Plata que atravesaba la misma situación y en su momento tuvieron que salir hasta cazar para poder sobrevivir.

“Yo tengo ocho gatos y dos perros que están en adopción. Son todos de la calle que fueron apareciendo, y uno trata de cuidarlos y mantenerlos. Uno es un perro galgo y el otro es muy simpático y mestizo y lo bautizamos “Corchito”. El lunes, unas personas se lo llevaron, pero a los doscientos metros de acá se arrepintieron y lo devolvieron”, relató Norma, quien tiene como punto de referencia la carpa de la esquina de 155 y 66, para poder conversar con las personas que estén interesadas en poder adoptar a las mascotas.

Como ellos, otros vecinos de 66 y 155 pasarán un domingo especial, ya que nadie en el barrio hará la vista gorda ante la situación que atraviesa Gustavo en esta zona de La Plata.

El domingo no faltará el que se acerque a compartir un huevito de chocolate. Pero hoy también se espera que alguno pueda donar pescado o pastas para respetar la tradición y comenzar a celebrar de una forma muy especial “las pascuas solidarias en una esquina de Los Hornos”.