Luego de 170 años, guacamayos rojos vuelven a volar en los Esteros del Iberá

Un programa de reintroducción de la especie liberó 17 de estas aves y puso fin a su extinción.

Luego de más de un siglo y medio, los guacamayos rojos volvieron a ser parte del ecosistema de los Esteros del Iberá, en Corrientes, gracias a un programa de reintroducción de la especie que puso fin a la extinción de estas aves. Según especialistas, se trata de “un proyecto sin antecedentes” en el que también “se trabaja a prueba y error”, informó Télam.

La iniciativa surgió en el Centro de Conservación de Fauna Silvestre Aguará, que reunió a la Fundación Rewilding Argentina y al Gobierno de Corrientes en el desarrollo del Programa de reintroducción de animales.

En diálogo con Télam, la bióloga Talía Zamboni de Rewilding Argentina y el veterinario del Centro de Conservación Aguará, Jorge Gómez, explicaron el por qué de la desaparición de estas aves y cómo lograron devolverlas a su hábitat.

Las aves que ahora están en Corrientes, llegaron desde distintos lugares. Algunas fueron rescatadas tras estar en cautiverio, y otras llegaron desde el bioparque Temaiken y del Ecoparque porteño. Los especialistas deben trabajar con ellas para su adaptación, cambiando su dieta y hasta realizando entrenamientos de vuelo.

Según indican los registros, los guacamayos rojos fueron vistos por última vez, antes de extinguirse, en 1850, informó la bióloga Zamboni.

"Desaparecieron porque muchos tomaron a la especie como mascota, también sufrieron persecución por el tráfico de plumas y otro factor fue la tala de árboles, porque habitan zonas boscosas y fueron perdiendo territorio y desapareciendo", señaló .

Hasta el momento, ya son 17 los guacamayos que vuelan libres, dos de ellos una pareja de pichones "Tuco" y "Puré", que nacieron en libertad y andan por la zona de reserva, junto a sus padres.

"Su hábitat son los bosques a orillas del río Paraná", detalló la bióloga y agregó que "la experiencia de reintroducción de la especie, logró que dos aves nazcan en vida silvestre". Además, los guacamayos consumen frutos silvestre, y ayudan a regenerar los bosques nativos evacuando las semillas en distintos lugares.

Por su parte, Jorge Gómez, relató que las aves normalmente "vuelan en la zona de Cambiretá en cercanías de Ituzaingó, predio del Parque Nacional Iberá, uno de los portales de los esteros".

"Es una serie extinta que se reintroduce, un proyecto sin antecedentes, en algunos aspectos se trabaja a prueba y error, por ejemplo, la primera suelta se hizo en 2015, sin entrenamiento y no fue muy exitosa. Vamos aprendiendo de los errores", contó.

En tanto, remarcó que "la liberación es paulatina y en combinación con la dieta". "También se realiza un entrenamiento anti predatorio, para que reconozcan el peligro", añadió.

Luego del entrenamiento de las aves en el Centro Aguará, Gómez explicó que una vez liberadas se las monitorea a través de collares que dependen de una antena y se las visualiza en un recorrido a pie o caballo y en alguna oportunidad, en avioneta.

"A veces la gente que los ve nos manda fotos o videos, porque la antena sólo los registra en un radio de 8 kilómetros y eso es un gran aporte", mencionó y agregó que los guacamayos rojos suelen ser vistos en la zona del Yerbalito, Villa Olivari y Loreto, al noreste y centro de Corrientes.

"Seguiremos liberando guacamayos, estamos trabajando en eso, para que exista una población que se reproduzca en libertad", concluyó el veterinario del Centro de Conservación de Fauna Silvestre Aguará de Corrientes.