Se trata de espacios para la contención de personas que recibirán trasplantes, a cargo de la familia de Justina Lo Cane, cuyo caso dio origen a la ley vigente de donación de órganos.
22/11/2021 - 00:00hs
La historia de Justina Lo Cane conmovió al país hace algunos años y la lucha de su familia llevó a la sanción de la ley nacional que cambió el proceso de donación de órganos en la Argentina. Ahora también impulsan el desarrollo de “Casa Justina” en todo el país y una de ellas se hará en La Plata. Diario Hoy dialogó con Ezequiel Lo Cane, papá de la niña, quien explicó de qué se trata.
—¿De qué se trata el proyecto de Casa Justina y cómo funciona?
—Empezamos con la concientización, luego fuimos con la ley y después de lograrla nos dimos cuenta de que había que articular con el accionar entre diferentes actores del sistema de salud, en especial del trasplante de órganos. Por eso, vimos que era importante tener un lugar físico para dar contención y formación por quienes pasan por esa situación y ser un lugar donde haya reuniones entre actores para buscar información en salud. El foco principal es recibir a quienes quieran saber más de trasplantes, dar prioridad para las personas de bajos recursos que requieran trasplantes con el alojamiento. Es dar contención e innovación con la alegría que expresaba Justina.
—¿Cuántas casas hay en la Argentina?
—Son 7 casas en todo el país, en la provincia de Buenos Aires vamos a tener una en La Plata. En Mendoza, Salta y la Ciudad de Buenos Aires ya están funcionando; incluso en esta última tenemos un emprendimiento de venta de churros, que se venden para solventar los costos.
—¿Cuándo prevén que pueda estar en funcionamiento en La Plata?
—En La Plata estamos definiendo el lugar. Una vez que lo tengamos confirmado, tenemos que hacer la planificación de la obra. Hacer una casa lleva su tiempo, ojalá que de acá a un año podamos estar hablando de un gran avance.
—¿Cómo es la relación con los organismos de salud ligados a la temática?
—Esta es una iniciativa de ciudadanos, que a partir de los recursos, ideas y esfuerzos que llevamos adelante logramos que esto suceda. A medida que avanzamos coordinamos con los organismos del Estado, como los ministerios de Salud y con cualquier entidad que puede contar con la Casa Justina para hacer sinergia.
—¿Qué destacas desde la sanción de la Ley Justina a esta parte?
—Destaco lo maravilloso que es que haya personas que se salvan y cada vez son menos personas las que tienen que pasar por lo que pasó Justina. Hay una concientización mayor en cuanto a la donación de órganos. Nos dicen que cuando van a buscar al donante, se encuentran con gente que conoce la ley. Se ha generado una situación hermosa de más y mejor calidad de vida.