El pedido nace luego de que un jóven de 21 años acribillara con un fusíl de asalto AR-15 a diez personas en un supermercado en Colorado, y se registra como el séptimo ataque en Estados Unidos en lo que va del año.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, instó a los congresistas a prohibir los fusiles de asalto y a regular la tenencia de armas, luego de que un joven de 21 años matara a tiros a 10 personas en un supermercado de Colorado, en el oeste del país, en el segundo ataque de este tipo en seis días.
El mandatario pronunció un discurso solemne en la Casa Blanca, luego de que Estados Unidos registrara el segundo tiroteo masivo en una misma semana, que renovó el debate sobre la necesidad de limitar la tenencia de armas en el país.
"No debemos esperar otro minuto; insto a mis colegas de la Cámara de Representantes y del Senado a actuar", dijo Biden, apenas una semana después de otro tiroteo que dejó ocho muertos en Atlanta, en el sureño estado Georgia.
"Deberíamos prohibir los fusiles de asalto y los cargadores de alta capacidad en este país", urgió el líder demócrata, quien recordó que el Congreso logró superar sus divisiones y aprobó un veto a ese tipo de armas durante 10 años en 1994, cuando era senador y presidente de la Comisión Judicial.
Biden también sugirió prohibir los cargadores de alta capacidad y abogó por el fortalecimiento de los sistemas de verificación de antecedentes, entre otras medidas, reportó la televisora CNN.
"Esto no es, no debería ser, un tema partidista, es un tema estadounidense", opinó y sentenció: "Salvará vidas, vidas estadounidenses. Tenemos que actuar".
Un hombre de 21 años fue imputado por homicidio por el tiroteo en el supermercado King Soopers, en Boulder, a 50 kilómetros al noroeste de Denver, la capital de Colorado, en el que murieron el lunes 10 personas de entre 20 y 65 años.
El fiscal al frente de la investigación, Michael Dougherty, indicó que el sospechoso se llama Ahmad Al Aliwi Alissa, que es oriundo de Arvada, Colorado, y que vivió casi toda su vida en el país.
Aún se desconocían los motivos por los que abrió fuego el joven, quien estaba internado en un hospital y será trasladado pronto a una prisión, precisó Dougherty en declaraciones a periodistas.
En tanto, la jefa de la policía local, Maris Herold, dijo a la prensa que agentes de la fuerza se enfrentaron a los tiros con Alissa dentro del supermercado y que un policía de 51 años, Eric Talley, padre de siete hijos, murió en ese intercambio de disparos.
Testigos que estaban dentro de la tienda en el momento del tiroteo dijeron que escucharon múltiples disparos antes de correr hacia la entrada.
"Casi me matan por ir a comprar una gaseosa con un paquete de papas fritas", contó a CNN Ryan Borowski. "Ahora siento que no hay ningún lugar seguro", agregó.
Decenas de vehículos blindados, ambulancias y personal armado, incluyendo agentes del FBI y del SWAT, se desplegaron en el lugar.
Según diversos medios estadounidenses, el hombre iba armado con un fusil de asalto AR-15, un arma que suele utilizarse en este tipo de matanzas, un mal recurrente en Estados Unidos.
La ciudad de Boulder impuso una prohibición sobre los fusiles de asalto tras la matanza de Parkland, en Florida, en 2018.
Sin embargo, la semana pasada, un juez bloqueó ese veto, reportó el diario The Denver Post, algo que fue celebrado por la Asociación Nacional del Rifle (NRA), el mayor grupo de lobby a favor de las armas en el país, opuesto a cualquier tipo de limitación a la Segunda Enmienda de la Constitución, que asegura el derecho a la tenencia de armas.
Ante esta nueva tragedia, la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, dijo que el Congreso está con las familias de las víctimas de estos tiroteos y que ya es "suficiente".
"Hacen falta acciones para evitar que este flagelo continúe haciendo estragos en nuestras comunidades", señaló Pelosi.
El líder demócrata en el Senado, Chuck Schumer, afirmó que la cámara alta "debe avanzar y lo hará en la legislación para ayudar a controlar la epidemia y la violencia con armas".
"Mi corazón se rompe viendo este incidente indescriptible ocurrir en nuestra comunidad de Boulder", dijo el gobernador de Colorado, Jared Polis, quien calificó el suceso de "tragedia sin sentido".
"Las palabras no pueden hacer justicia a la tragedia que aconteció esta tarde", tuiteó anoche el alcalde de Boulder, Sam Weaver.
Este tiroteo ocurrió días después de que otro joven de 21 años matara a ocho personas la semana pasada en ataques a tres salones de masaje propiedad de estadounidenses de origen asiático en Atlanta.
Estas dos matanzas tan seguidas, tras un periodo de relativa calma durante la pandemia, volvieron a impulsar el debate sobre un endurecimiento de ls legislación sobre la tenencia de armas.
En las encuestas, una mayoría de los estadounidenses se declaran a favor de una mayor regulación, una postura que también apoya la Casa Blanca, pero a la que se oponen los republicanos, cuyos votos -al menos nueve- son necesarios para aprobar una medida al respecto en el Senado.
Al igual que hizo la semana pasada por las víctimas del tiroteo en Georgia, Biden ordenó poner las banderas nacionales a media asta en homenaje a los fallecidos, lo que supone un duelo nacional de casi dos semanas.
El del lunes fue el séptimo tiroteo masivo del año en Estados Unidos, según una base de datos elaborada por el diario USA Today y la Northeastern University.
Colorado ya fue escenario de dos de los tiroteos masivos más graves de la historia de Estados Unidos.
En 1999, dos adolescentes mataron a 12 compañeros y un profesor en la escuela secundaria de la localidad de Columbine antes de suicidarse.
Después, en 2012, un hombre fuertemente armado irrumpió en un cine que proyectaba una película de Batman en Aurora y mató a 12 personas. El agresor cumple ahora una pena a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.