El gobierno italiano señaló que dejará de aplicar el fármaco de AstraZeneca a personas menores de 60 tras la muerte de una joven de 18 años que sufrió una trombosis cerebral.
Al igual que varios países europeos, Italia comenzará a combinar vacunas contra el coronavirus. La medida se oficializó tras el fallecimiento de una joven de 18 años que había recibido la vacuna de AstraZeneca el pasado 25 de mayo. De esta manera, aquellos menores de 60 años que se aplicaron la primera dosis de este laboratorio se deberán inocular con el fármaco de Pfizer o el de Moderna para poder completar el esquema establecido.
Camilla Canepa perdió la vida el pasado jueves luego de haber sido internada el domingo previo en Génova tras sufrir una trombosis cerebral. A pesar de esto último, todavía no se confirmó cuál fue la causa de su muerte.
La oriunda de Liguria recibió su primera aplicación en las jornadas especiales que impulsaron las autoridades italianas, que consistían en vacunar contra la Covid-19 únicamente a jóvenes.
Tras el deceso de la adolescente, comenzaron a recaer las críticas sobre las decisiones que tomó el gobierno local en torno a la apertura de inoculación con esta vacuna para los diversos grupos etarios. Vale remarcar que previamente se había decidido vacunar a los menores de 50 con la vacuna de AstraZeneca y luego se dispuso que sea aplicada a mayores de 60, para finalmente abrirla a todas las edades.
Luego de este episodio se decidió que se vuelva a aplicar nuevamente a las personas mayores de 60 años, mientras que aquellos que ya hayan recibido su primera dosis, completarán su inmunidad con la vacuna de Pfizer o de Moderna. Esta situación se suma así a los episodios que ocurrieron en países como Alemania o Dinamarca, donde se informó que se prohibirá la vacuna de esta empresa o se suspenderá para cierta franja etaria. En comparación a la cantidad de dosis que fueron distribuidas, el número de casos es realmente ínfimo.
El pasado mes de abril la Agencia Europea de Medicamentos en un comunicado advirtió no usar la vacuna de AstraZeneca en personas con problemas de coagulación sanguínea, tras establecer un vínculo causal entre ambas partes.
Más allá de esta particularidad, volvieron a asegurar que la vacuna es buena y su balance es positivo en relación con los efectos secundarios que pueden llegar a existir. De hecho, días atrás en su cuenta oficial de Twitter la Agencia publicó: “El balance beneficio/riesgo de la vacuna AstraZeneca Covid-19 es positivo y sigue autorizada para todas las poblaciones”.
A pesar de los imprevistos y el cambio de postura sobre esta vacuna por parte de las autoridades, las segundas dosis para aquellas personas que la están esperando no se demorarán y se mantendrá el cronograma que indica esperar entre 8 y 12 semanas.
Todo este escándalo se produce en un momento de clara baja de contagios de Covid-19 en Italia. Desde el comienzo de la pandemia, la cantidad de casos positivos supera los 4.200.000, ubicándose en el puesto ocho de países con más infectados. Debido a la pandemia, ya fallecieron más de 127.000 italianos. A su vez un 26% de la población mayor a 12 años recibió las dos aplicaciones necesarias, significando casi unas 13 millones de dosis. Por otro lado, un poco más de 25.500.000 personas se encuentran aguardando su turno para aplicarse la segunda dosis.
Ante este panorama ya varias regiones, gracias al buen escenario epidemiológico, no tendrán más restricciones. Esta baja de positivos y la flexibilización de medidas se está replicando también en varios países de la región, donde la fuerte campaña de vacunación y el buen clima lograron disminuir la circulación del coronavirus.