Jornadas de violencia en Chile

Un muchacho de 21 años fue asesinado tras recibir algunos impactos de bala, en la comuna chilena de Melipilla, a unos 70 kilómetros de la capital, Santiago. El hecho fue en el marco de una serie de protestas que se vienen realizando hace dos días en el vecino país, en rechazo a la crisis social y económica que se ha acrecentado por la pandemia.

Además de la muerte del joven, de nacionalidad haitiana, se registraron decenas de detenidos y un ómnibus público fue incendiado. Todo sucedió entre la noche del viernes y la madrugada de ayer, en lo que fue el segundo día consecutivo de protestas en varias ciudades.

Las manifestaciones, convocadas por redes sociales en contra del gobierno, son para denunciar la aplicación de medidas restrictivas como el toque de queda. Mecanismo por parte de las autoridades para tener vía libre en la represión, según afirmaron quienes salieron a las calles.

En varios puntos de Santiago se levantaron y prendieron fuego barricadas en pleno toque de queda, mientras las fuerzas policiales arremetieron con gases lacrimógenos y chorros de agua contra las personas que se movilizaron.

También hubo cacerolazos en algunos barrios de la capital para mostrar el descontento social de las familias que no han recibido ayuda de parte del gobierno. La crisis sanitaria provoca efectos económicos y sociales del otro lado de la cordillera, y el fantasma de lo sucedido en octubre de 2019 con marchas multitudinarias vuelve a estar presente.

Según informó el general Enrique Monrás, jefe de la zona Oeste de Carabineros de la Región Metropolitana, el joven asesinado recibió cuatro disparos en las inmediaciones de un supermercado en la comuna de Melipilla. Además, expresó que la fiscalía ordenó una investigación para encontrar a los responsables y confirmó la detención de nueve personas acusadas de participar en los disturbios.

Las protestas se desarrollaron en ciudades como Valparaíso, Temuco, Antofagasta y Punta Arenas, entre otros puntos.