El candidato a presidente de Brasil se dirigió a las instituciones deportivas para “formar con conciencia social” a los futbolistas profesionales. En tanto, Estados Unidos pidió “elecciones limpias” para este domingo.
En los últimos días de la campaña electoral, el expresidente y actual candidato de la izquierda en Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, envió un mensaje a las entidades deportivas, sobre todo a las que tienen al fútbol como deporte de base, y alertó sobre el avance del racismo en el deporte.
Por eso, pidió a los clubes que “promuevan la conciencia social” entre los niños y adolescentes de las divisiones inferiores. Esto ocurrió en el marco de un encuentro con figuras del deporte y representantes de entidades de hinchadas de equipos de fútbol alineadas con la izquierda. Allí reivindicó la política deportiva lanzada por su gobierno entre 2003 y 2010, que permitió el desarrollo del deporte olímpico a los mejores niveles de la historia.
“Estoy triste porque vivimos un tiempo de racismo muy violento, tal vez un racismo facilitado por los teléfonos celulares. Si bien estos aparatos son importantísimos, en ellos se esconden los delincuentes, los que odian, los que tienen prejuicios”, afirmó Lula, que el próximo domingo enfrentará al actual presidente Jair Bolsonaro en las urnas.
Acto seguido, agregó sentir “mucho orgullo” de que “chicos de las barriadas de las periferias puedan vencer en la vida y que lo primero que hagan es comprarle una casa a la mamá”.
“Me parece que sería bueno que esos chicos tengan conciencia social para pasarla a la sociedad. No es posible que tengamos gente, como en el bolsonarismo, queriendo construir una supremacía blanca”, sostuvo.
Lula también criticó la falta de espacios públicos para jugar al fútbol en las ciudades, por lo que propuso “una verdadera revolución para cambiar la práctica deportiva” incluso en la planificación de construcción de escuelas.
Estados Unidos ya intervino en las elecciones
En tanto, desde los Estados Unidos ya se expresaron respecto de las elecciones en Brasil y, en medio de tensiones políticas, convocaron a realizar elecciones “libres y limpias”.
“Vamos a monitorear de cerca y confiar en la fortaleza de las instituciones democráticas de Brasil”, expresó en conferencia de prensa la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre.
A ello añadió que han visto “informes recientes de violencia y, aunque el derecho a protestar es fundamental en cualquier democracia, Estados Unidos condena
cualquier acto de violencia e insta a los brasileños a hacer oír sus voces de manera pacífica”.