Francia suma 21.150 casos y 436 muertos, con un ingreso en la UCI cada cuatro minutos
Desde el miércoles se admitieron 311 personas en cuidados intensivos "a pesar de la ralentización de la circulación del virus", dijo el ministro de Salud.
En Europa, muere un infectado cada 17 segundos. Ante la segunda ola, preocupan los meses invernales por venir.
20/11/2020 - 00:00hs
Las cifras en España continúan fuera de control, y en las últimas horas ha sumado otros 16.233 casos de coronavirus, de los cuales 6.915 fueron diagnosticados el miércoles, y se añaden a los 1.541.574 positivos que se confirmaron desde el inicio de la pandemia.
Para peor, en 24 horas también se agregaron 252 nuevos fallecimientos por Covid, que llevan a 1.313 decesos en la última semana y a 42.291 desde que comenzó la crisis sanitaria.
La incidencia acumulada media del país en los últimos 14 días continúa descendiendo paulatinamente, al igual que sucede con las muertes reportadas diariamente, y se sitúa en los 436 casos cada 100.000 habitantes. Mientras, como viene sucediendo en las últimas jornadas, las cifras de ocupación de camas hospitalarias y de Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) por pacientes con Covid permanecen estables, en torno al 15% y el 32%, respectivamente.
Con estos números en España, la realidad en Europa y Estados Unidos los ha convertido una vez más en el epicentro de la pandemia de coronavirus, según afirmaciones del director regional de la Organización Mundial de la Salud, Hans Kluge.
“Europa es una vez más el epicentro de la pandemia, junto con Estados Unidos”, afirmó Kluge en Copenhague, e indicó que “hay una luz al final del túnel”, al tiempo que advirtió que los siguientes seis meses “serán difíciles”. “Europa representa el 28% de los casos mundiales, con un 26% de muertes acumuladas en la región”, indicó.
“La semana pasada, Europa registró más de 29.000 nuevas muertes por Covid-19. Esto significa que una persona muere cada 17 segundos”, añadió sobre los números que elevaron los fallecimientos en la región en un 18%.
Al mismo tiempo, Kluge afirmó que existen señales prometedoras de que las acciones que han vuelto a tomar los gobiernos de varios países europeos –incluidos Reino Unido, Francia y España– para detener la propagación del virus están funcionando. Así, el número de casos semanales en la región se redujo la semana pasada por primera vez en tres meses, disminuyendo en un 10%, hasta situarse en los 1,8 millones.
En este contexto, Kluge ha reiterado su postura de que “el confinamiento es una medida de último recurso”. “El uso de mascarillas no es de ninguna manera una panacea y debe combinarse con otras medidas. Sin embargo, si el uso de mascarillas alcanza el 95%, los cierres no serán necesarios”, afirmó.