En el marco de la guerra entre Rusia y Ucrania, el presidente chino busca darle un "nuevo impulso" a las relaciones con su vecino.
En el contexto del conflicto entre Rusia y Ucrania, el presidente chino, Xi Jinping, ha llegado a Moscú para una visita importante en la que espera que se genere un "nuevo impulso" en la relación bilateral. Xi ha destacado que esta visita será fructífera y contribuirá al desarrollo sano y estable de las relaciones entre China y Rusia, y ha subrayado que ambos países son "buenos vecinos" y "socios fiables".
Si bien Xi no se ha referido directamente a Ucrania en sus declaraciones, ha prometido que su gobierno apoyará a Rusia en la defensa de un sistema basado en el derecho internacional y en la Carta de la ONU.
El portavoz del Kremlin ha afirmado que la guerra en Ucrania será inevitablemente discutida durante las conversaciones entre Putin y Xi, y que Putin ofrecerá explicaciones exhaustivas sobre la invasión iniciada hace más de un año.
Además, China ha evitado condenar de manera clara la invasión a Ucrania y ha presentado su propio plan de paz para resolver el conflicto.
En otro gesto de apoyo a Putin, China ha pedido a la Corte Penal Internacional que evite el doble rasero y respete la inmunidad de los jefes de Estado, después de que emitiera una orden de detención contra Putin por crímenes de guerra.
Esta será la primera reunión entre ambos mandatarios desde el inicio de la guerra el año pasado.