El empresario argentino Marcelo Balcedo acciona legalmente contra la fiscalía del vecino país y su Justicia, luego de que esta arruinara la compra de dos aeronaves y echara a perder contratos millonarios por su arrendamiento.
El Estado uruguayo reconoció que estropeó el leasing que el empresario argentino Marcelo Balcedo tenía sobre dos aviones, un Learjet 60 y un Gulfstream IV, esta última una moderna aeronave capaz de realizar vuelos de largo alcance.
Estas aeronaves estaban pagándose solas, ya que eran parte de un plan de negocios que incluía contratos millonarios –unos 6 millones de dólares– producto de su alquiler, de vuelos privados con contratos de servicios, a lo que además debe sumársele otro hecho grave y no menor, que es que ambas tenían patente “November”, americana.
En el caso del avión más importante, el Gulfstream IV, fue retenido en Uruguay aun sabiendo que no se puede retener una aeronave extranjera de estas características estando en leasing. Esto significa que ambas estaban alquiladas con opción a compra, como siempre sucede en este tipo de negocios aeronáuticos a nivel mundial.
Pero también dentro de este leasing tenían diagramado y garantizado un plan de negocios con contratos a largo plazo que hacían viable el negocio desde todo punto de vista.
Al momento de la detención de Balcedo, por el avión Gulfstream IV ya se habían pagado unos tres millones de dólares, y como resultado de la retención indebida de los aviones, que no tenían nada que ver ni con Argentina ni con Uruguay, ya que era un negocio operativo en Estados Unidos y ajeno totalmente a toda la situación judicial que se estaba gestando, se terminaron por caer los contratos establecidos, con el perjuicio que esto acarreó para sus dueños.
Es menester aclarar que este juicio por 22 millones de dólares es contra la Fiscalía uruguaya, y comprende a todos los fiscales que actuaron en la causa Balcedo, además de Jorge Díaz, el ex fiscal general de la Nación, jefe de todos los fiscales, quien tenía una inquina personal manifiesta contra el empresario argentino, a la que se suma una inquina política, y que el tiempo se encargó de demostrar que no era ideológica, sino personal.
En ese marco, es necesario recalcar que el exfiscal de Corte de Uruguay pertenece al Frente Amplio, y actualmente es el abogado representante de Fabián “Pepín” Rodríguez Simón. Además, se conoció que mantuvo varias reuniones personales en ambas márgenes del Río de la Plata con Mauricio Macri, exmandatario argentino que persiguió sin tregua a los sindicalistas que “molestaban” durante su gestión y por la que actualmente en la Justicia argentina se está llevando adelante la causa conocida como “Gestapo antisindical”.
Según Balcedo, “este juicio cae ahora contra el Estado uruguayo, gobernado por el actual presidente Luis Lacalle Pou, quien no tuvo ningún tipo de responsabilidad sobre este asunto, pero el gobierno anterior y este son la continuidad del Estado lamentablemente, y alguien tiene que responder”.
“Lamentablemente este juicio llega por la impericia y la malicia manifiesta de todos los fiscales actuantes en la causa y, reitero, por la inquina del jefe de fiscales Jorge Díaz, pertenecientes todos al Frente Amplio uruguayo”, culminó diciendo Balcedo.
Este es el primero de una serie de juicios que va a realizar Balcedo no solamente contra el Estado, contra privados y particulares uruguayos en suelo oriental, sino también en Argentina contra organizaciones y estructuras gubernamentales, además del sector privado de nuestro país.