La Constitución indica que el presidente debe ser elegido de forma indirecta.
La edad legal para votar en Estados Unidos es a los 18 años, más parecido al sistema europeo que al latinoamericano, donde en algunos países es a los 16 años. Las elecciones en Estados Unidos han dado siempre problemas de credibilidad debido al sistema de votación utilizado y, tal vez, puede ser problemático en algunos sitios donde no hay actualización de los colegios electorales y las máquinas de votación.
La elección del presidente se gestiona a través del Colegio Electoral. La Constitución de los Estados Unidos indica que el presidente debe ser elegido de forma indirecta por un colegio de grandes electores, pero deja en manos de los estados el procedimiento de selección de los electores presidenciales, por lo que no existe uniformidad. Es decir, al igual que en algunos países, al presidente se le elige de forma indirecta, en este caso el ciudadano vota a los electores en cada estado y, dependiendo del número de electores que salgan elegidos, se decidirán por el candidato republicano o demócrata.
En cada estado, el vencedor se lleva todos los votos electorales que le corresponden. Sale finalmente elegido presidente aquel candidato que obtenga la mayoría absoluta en el colegio electoral, sin que influya el resultado popular electoral obtenido en las urnas. El sistema mayoritario hace que sea frecuente que se produzca una desproporción considerable en las votaciones, es decir, un presidente puede tener unos pocos votos más que el candidato perdedor, pero ganarle sobradamente en las elecciones.
Muchos de los procesos electorales tienen peculiaridades. En este caso, el proceso electoral presidencial de Estados Unidos tiene una clave para poder saber quién será el ganador y son los llamados estados “bisagra” o “swing states”. Son lugares decisivos, ya que la mayoría de los otros estados siempre caen del mismo sitio, ya sea Demócrata o Republicano, en cambio, estos estados, no siempre están claramente decantados hacia un candidato u otro, lo que significa que son los estados que decidirán quién será finalmente el o la presidente.
Además, como se ha dicho, aunque se gane por un solo voto de diferencia, el candidato ganador es el que se lo lleva todo, por tanto, ganar en estos estados te asegura la victoria, ya que todos los electores van para el ganador.
Uno de los estados “bisagra” más importantes es Florida, puesto que cuenta con 29 electores, un número elevado. De hecho, en muchas elecciones se dice que Florida es la clave principal. Por ejemplo, en las elecciones entre George W. Bush y Al Gore, fueron pocos votos en Florida los que decidieron el ganador, que cayeron por la parte de Bush, y este, conforme al sistema electoral, se llevó todos los electores.