Jonathan Nievas, exintegrante de la AFI entre 2018 y 2019, confirmó ayer en la Justicia que estuvo bajo las órdenes del exjefe de Operaciones Especiales.
El exintegrante de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) Jonathan Nievas, ratificó ayer ante la Justicia que durante su paso por la central de espías estuvo bajo las órdenes del procesado exjefe de Operaciones Especiales, Alan Ruiz, quien recibía órdenes directas de Silvia Majdalani, subdirectora de la AFI durante el gobierno de la alianza Juntos por el Cambio.
Luego de esta declaración, Nievas se negó a responder preguntas, en el marco de la causa que investiga supuestas maniobras de espionaje ilegal desplegadas desde ese organismo durante la gestión de Mauricio Macri.
Nievas es uno de los policías metropolitanos que pasó a la AFI en comisión, entre 2018 y 2019, y, en su caso, está acusado de haber participado de maniobras de espionaje ilegal sobre los sindicalistas Hugo y Pablo Moyano, los exdiputados Nicolás Massot y Emilio Monzó y los magistrados Martín Irurzun (Cámara Federal porteña) y Carlos Rosenkrantz (exjuez de la Corte Suprema de Justicia).
“Cuando fui indagado por primera vez, expuse todo cuanto conozco. Expuse con detalles mis actividades dentro de la AFI y de quién recibía las ordenes de cada labor encomendada”, sostuvo el exespía en la ampliación de su indagatoria, que fue un descargo leído que le tomó menos de un minuto, según la agencia de noticias estatal Télam.
Antes de cerrar el descargo y de advertir que no estaba dispuesto a responder preguntas, aseguró que las actividades que desarrolló en la AFI las hizo “con la premisa de que todas y cada una estaban judicializadas”, de acuerdo a lo que le indicaban, en lo que fue la forma de intentar protegerse de las responsabilidades que se le atribuyen en el espionaje ilegal.
En su primera declaración indagatoria, el 7 de julio, Nievas había asegurado que la mayor parte de su tiempo en la AFI la dedicaba a la “explotación de prensa”, que su jefe directo y quien le daba las órdenes era Alan Ruiz, y que nunca le especificó las supuestas causas judiciales, en el marco de las cuales eran encomendadas las tareas.
En aquella oportunidad, en la que sí respondió preguntas, el exintegrante de la AFI reconoció que en alguna ocasión lo mandaron a “chequear domicilios” y tomar fotos a sus espiados, y aseguró que no sabía si lo que él le pasaba a Ruiz luego era remitido a otra persona.
En la audiencia virtual de ayer, desarrollada a través de la plataforma Zoom, intervinieron el juez federal Juan Pablo Augé y los fiscales que tienen delegada la investigación, Cecilia Incardona y Santiago Eyherabide.
En lo que va de la segunda tanda de indagatorias por el supuesto espionaje ilegal a dirigentes políticos y de toda índole, todos los exespías menos uno, Gustavo Ciccarelli, se negaron a responder preguntas e hicieron muy breves descargos.
Esta segunda ronda de declaraciones continúa hoy con la audiencia a la que está citado otro exintegrante de la AFI, Andrés Rodríguez, pero que llegó allí desde el Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB), y concluirá –de no mediar cambios en la agenda– con las indagatorias de los exjefes de la central de espías durante el macrismo, Gustavo Arribas y Silvia Majdalani, para el 9 y el 8 de octubre, respectivamente.
Los dos extitulares ya están procesados, además, por supuestas maniobras de espionaje ilegal desplegadas, en 2018, desde la AFI sobre el Instituto Patria y el domicilio de la entonces senadora Cristina Fernández de Kirchner.
Allanaron la quinta de Macri por violar la cuarentena
El juez federal de Tres de Febrero, Juan Manuel Culotta, ordenó hoy un procedimiento en la quinta Los Abrojos, donde vive el expresidente Mauricio Macri, para acceder a las cámaras de seguridad y poder establecer si violó la cuarentena tras su regreso de Europa.
La medida fue solicitada por el fiscal federal Jorge Sica, quien había reclamado primero al municipio de Malvinas Argentinas que lo proveyera de las copias digitalizadas de los registros de las cámaras de seguridad apostadas en la zona, pero recibió como respuesta que en ese lugar solo hay cámaras de seguridad privada por parte de la Subsecretaría de Seguridad municipal.
Macri, quien volvió de Europa el 3 de septiembre, debía permanecer en estricto aislamiento los catorce días posteriores a su llegada a la Argentina, pero el jueves 10 de septiembre se habría reunido en su quinta con intendentes bonaerenses del PRO, según reveló uno de ellos a través de un mensaje publicado en la red social Twitter.