Robo a Garro: el presunto poliladron calló ante la fiscal

El subteniente exonerado Miguel Patricio Masana, el único detenido por el violento robo ocurrido el miércoles pasado en la casa del intendente de La Plata, Julio Garro, se negó ayer a declarar ante la fiscal Virginia Bravo, la que consultada por Hoy, no descarta la hipótesis de que el episodio de inseguridad en realidad haya sido un mensaje mafioso intimidatorio.

Por su parte, el ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo, afirmó ayer que el gobierno de la Provincia avanzará con la reforma de la Policía pese a saber que "pueden pasar cosas o señales", como el robo a Garro.

"Estamos trabajando en una reforma integral que presentaremos antes de fin de mes con la gobernadora en modificar en lo que tiene que ver con las estructuras y equipamientos, pero principalmente nosotros no vamos a bajar los brazos. El primer día dijimos que la lucha era contra el narcotráfico", aseveró Ritondo.

Ayer, la fiscal, trabajó toda la jornada para avanzar en el esclarecimiento. Dispuso que se le tome testimonio a los vigiladores privados de guardia en el momento del asalto en el Grand Bell, se analizó el entrecruzamiento de llamadas con el teléfono del detenido y continuaron las pericias sobre las armas y drogas encontradas en la casa alquilada por Masana.

Un vocero judicial le dijo a Hoy que el policía detenido “no manejaba dinero en el cumplimiento de la labor en la fuerza”. “Pertenecía a la comisaría Primera y era un caminante que custodiaba los restaurantes de la zona céntrica”, explicó la misma fuente en base a lo informado por los jefes policiales de Masana.

“En 48 horas no podemos saber la vida de una persona. Estamos avanzando pero llevará tiempo poder establecer cómo se movía el subteniente, presunto cómplice de los dos delincuentes que asaltaron a la familia de Garro”, añadió el vocero judicial.

“Son para consumo personal”

Los investigadores policiales continúan recolectando información de interés para la causa. Uno de los detectives explicó que “es una posibilidad cierta que los dos prófugos sean integrantes de la fuerza”.

Respecto a la torpeza de los ladrones en no considerar a las cámaras de seguridad, el jefe policial indicó que “fueron captados por filmadoras ubicadas en la casa de un vecino, las que están disimuladas”.

“Se ve a los dos delincuentes ingresar a la camioneta Mercedes Benz negra del policía, vecino del intendente”, afirmó el investigador.

A pesar de haber hallado en la finca de Masana 187 pastillas de metanfetaminas y 62 cristales de cocaína, la novia del expolicía, que trabaja como comerciante, hasta el momento no fue imputada por ningún delito. Uno de los pesquisas detalló que el subteniente exonerado, al ser consultado por los estupefacientes secuestrados en su casa, dijo entre risas que “son para consumo personal”.
 
Sin novedades de los prófugos

Los dos sujetos que irrumpieron en la casa de Garro continúan prófugos y según un vocero policial “no hay pistas concretas sobre sus destinos”.

Todavía no se recibió el informe sobre si se detectaron huellas dactilares en la camioneta de Masana, con la que supuestamente se escabulleron del barrio privado.

El uniforme no se mancha

Más allá del avance en la investigación judicial y policial, hay una lectura política por el asalto que padeció la familia del intendente platense. No fue un hecho al voleo. Los delincuentes sabían que se metían en la vivienda del intendente y así lo explicitaron ante las víctimas: la esposa, las cuatro hijas, la cuñada y dos sobrinas de Julio Garro.

Y el momento tampoco parece haber sido elegido al azar. El ataque fue horas después de que la gobernadora María Eugenia Vidal anunciara lo que fue oficializado ayer: que el personal de la Policía y del Servicio Penitenciario Bonaerense con categoría igual o superior a la de subcomisario o equivalente, o personal de categoría inferior a cargo de una comisaría; personal que intervenga en el manejo de fondos públicos, administre patrimonio público, integre comisiones de adjudicaciones, compra y recepción de bienes y/o servicios, participe en licitaciones y concursos; y jefes de personal o recursos humanos, presenten una declaración jurada patrimonial.

Por eso el ministro de Seguridad, Cristian Ritondo, aclaró que “nosotros estamos en un trabajo de reforma amplia en la provincia de Buenos Aires, con la Policía, con lo que tiene que ver con la seguridad. Queremos separar a los buenos de los malos policías. Lo dijimos el primer día, aquel que manche el uniforme se tendrá que ir de la fuerza”.