Salpicado por la corrupción, Lula anunció que quiere volver a la presidencia en 2018

El ex mandatario, investigado por el caso de la estatal Petrobras, comunicó su deseo de volver a postularse como candidato del PT en las elecciones de 2018. La Justicia analiza si ocultó su patrimonio

"Quiero decir bien alto: tendré 72 años y el tesón de alguien de 30 para ser candidato a la Presidencia de la República", dijo ex presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010), durante la fiesta del 36 aniversario de su partido, celebrada este sábado en Río de Janeiro. Al realizar este anuncio Lula recibió una cerrada ovación por parte de los cientos de afiliados al partido presentes en el evento.

El PT fue fundado en un colegio de San Pablo el 10 de febrero de 1980, en plena dictadura militar, por un grupo de intelectuales, obreros y militantes de izquierda entre quienes destacaba Lula, entonces un aguerrido dirigente sindical en San Bernardo de Campo, el cinturón industrial de esa ciudad.

Más allá de la fiesta de aniversario, el acto del PT se convirtió en una auténtica muestra de apoyo al ex mandatario, que actualmente atraviesa por un momento delicado debido a diversas acusaciones de corrupción que pesan sobre él.

En estos momentos Lula se enfrenta a dos investigaciones por supuesta ocultación de patrimonio, si bien sus abogados solicitaron ayer a la Corte Suprema del país la suspensión de ambas.

Las indagaciones buscan esclarecer si el ex presidente es propietario de un apartamento y de una casa de campo, ambas en el estado de San Pablo, y que fueron reformadas por constructoras salpicadas por el gigantesco escándalo de corrupción en la petrolera estatal Petobras.

Lula, que en todo momento ha negado las acusaciones, bromeó con los presentes al decir: "Acepto hasta que levanten mi secreto bancario y telefónico; si ese es el precio, sea. Pero cuando esto acabe quiero que me den un apartamento o una casa de campo".

Este mismo sábado por la mañana, en el marco de las celebraciones del PT, el ministro de Comunicación Social de la Presidencia, Edinho Silva, había defendido la honestidad del ex presidente.

"Ciertamente tiene aclaraciones para todas las cuestiones que están siendo abordadas. Pero no estamos de acuerdo con que se utilicen estos asuntos para llevar a cabo un proceso de destrucción pública de su imagen", señaló Silva en declaraciones recogidas por la Agencia Brasil.

El político de 70 años no eludió hablar de los casos de corrupción que en estos momentos se ciernen sobre el PT, principalmente en el marco del escándalo que envuelve a la estatal Petrobras, y dijo que "si alguien del partido actuó mal tendrá que pagar".

Sin embargo, Lula acusó a la oposición y a algunos medios de comunicación de ser los principales responsable de una campaña de desprestigio contra su partido y les advirtió de que, de ahora en adelante, "se acabó el 'Lulinha' de paz y amor" y que les dará "la respuesta que se merecen".