González Fraga reemplazará a Melconian en el Banco Nación

Siguen los cambios en el equipo económico del Gobierno

Ayer se conoció una nueva modificación entre los que manejan las finanzas nacionales: Javier González Fraga reemplazará a Carlos Melconian en el Banco Nación. Desde Presidencia y la Jefatura de Gabinete buscan eliminar las voces disonantes. Guiño para la UCR

Luego del cambio que se había dado la última semana de diciembre en el gabinete de Mauricio Macri, con la salida de Alfonso Prat Gay y los ingresos de Nicolás Dujovne como ministro de Hacienda y Luis Caputo en la cartera de Finanzas, ayer se conoció una nueva modificación en el equipo económico del Gobierno nacional.

El titular del Banco de la Nación, Carlos Melconian, presentó su renuncia por pedido del Presidente y será reemplazado en el cargo por el economista radical Javier González Fraga. La decisión se tomó mientras Dujovne y Caputo se encuentran desarrollando distintas tareas en el exterior.

El ministro de Finanzas se encuentra realizando un road show en las principales plazas bursátiles donde se colocará un bono argentino para tratar de asegurar financiamiento este año, y el titular de Hacienda participa del Foro Económico Mundial en Davos.

González Fraga, quien fue titular del Banco Central durante la primera administración de Carlos Menem, asume en un contexto caracterizado por la recesión, altos niveles de inflación, despidos y cierres de empresas (ver página 5).

Las internas que alejaron a Melconian

Si bien desde el comunicado mediante el cual Presidencia informó la renuncia de Melconian no se brindaron detalles de la salida, y además se agradeció al funcionario por “su pasión y dedicación al frente del Banco Nación, por haberlo conducido con éxito y profesionalismo”, ni bien se difundió la noticia comenzaron a conocerse las internas que determinaron su reemplazo. 

Según trascendió, el hasta ayer titular del Banco Nación no tenía buena sintonía con el jefe de Gabinete, Marcos Peña, ni con uno de sus segundos, Mario Quintana, dos hombres que en la actualidad toman decisiones a la par del Presidente Macri.

También Prat Gay mantenía relaciones turbulentas con el jefe de Gabinete y sus asesores Quintana y Gustavo Lopetegui, integrantes del círculo principal del jefe de Estado.

Además, Melconian había salido, sobre fines del año pasado, a marcar diferencias con la gestión oficial, advirtiendo sobre los peligros de la política de endeudamiento que venía llevando adelante el Gobierno.

De hecho, desde el Ejecutivo aclararon que solicitaban su paso al costado, pero no el del resto del Directorio, por lo que se estima que continuarán en su cargo los seis directores que había llevado el ahora exfuncionario para que lo acompañasen en su gestión. El único que dejaría su lugar es el economista jefe, Luis Secco, quien volvería a la actividad privada.

También se conoció que, luego de que Mario Quintana le pidiera la renuncia, Melconian mantuvo una reunión ayer por la mañana con Mauricio Macri en la Quinta de Olivos, aunque se desconocen los términos en que se desarrolló ese encuentro.

Según confió a este medio una fuente muy allegada a Melconian, la relación con el Presidente “es muy buena y, si bien no hay ninguna queja respecto a las políticas, quieren poner personas más afines a la Jefatura de Gabinete”, lo que implica que las presiones de Peña y Quintana fueron determinantes en la decisión del Ejecutivo.

Javier González Fraga tiene mejor sintonía con el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, y en particular con el presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger. Con el ingreso del radical, el Gobierno intentaría dejar de lado las desavenencias que ha mantenido durante más de un año de gestión, buscando conformar un equipo económico más homogéneo y alineado.

“El descontento por la economía puede generar conflicto social”

Julio Gambina (Economista y profesor universitario)

El Presidente necesita menos gente que tenga un pensamiento relativamente autónomo y más personas que sigan un libreto más afín. El cambio de Prat Gay por Dujovne fue en ese sentido. El ascenso de Caputo, también. Se necesitaba que en el Banco Nación hubiera gente alineada con ese tipo de pensamiento, así como con la línea de Sturzenegger en el Banco Central. Melconian expresaba una voz propia, con ciertas contradicciones. 

Este es un año electoral y necesitan jugar con cierta contención social, pero a la vez quieren avanzar con una reforma estructural que signifique bajar el costo de producción y avanzar con la reforma laboral. Por eso están tratando de sacar por decreto lo que ya tiene media sanción en el Senado, que es la reforma de la ley de ART. Y todo esto se puede hacer este año si resuelven el ingreso de capitales. 

Si hay algo que se ve es el descontento de la sociedad, la realidad de la recesión y de la inflación. Necesitan mucha disciplina en el equipo del Gobierno porque hay grandes dificultades económicas que pueden generar descontento social. Hay una preocupación en un año electoral donde se están jugando no solo las elecciones de 2017, sino las de 2019. El descontento por la economía puede generar conflicto social. González Fraga, viniendo del radicalismo, es más funcional para esta etapa.

“Lo grave es que no hay modificaciones en las políticas”

MartÍn Hourest (Economista y dirigente del Partido GEN)

El Gobierno está tratando de emitir la señal de una homogeneización del discurso, pero nada tiene que ver con un cambio de políticas. Los que plantean que esto es un triunfo del gradualismo sobre los ajustadores se equivocan. Lo que quiere plantear el Presidente es que no hayan voces disonantes en un año electoral. Pero un discurso menos duro no conlleva políticas más laxas. Es un golpe publicitario que nada tiene que ver con un cambio en materia de financiamiento en el sector público.

González Fraga, además, es un economista de la UCR, con lo cual es una señal inequívoca que está permitiendo que gente cercana al radicalismo desembarque en puestos centrales de la administración.

Las internas en el gabinete se deben a que una coalición, que no tenía muy claro que iba a ser gobierno, empezó a medir los costos de gobernar. Y hacer esto no es meramente poner un grupo de gente con buenas intenciones a gestionar. 

Esto implica la oxigenación y el cambio de los equipos. Lo grave de esto -y lo quiero decir con todas las letras- es que estamos discutiendo cambios de equipo y no mutación de políticas, porque está claro que en lo que no acertaron desde el Gobierno es en la elección de las políticas.