Berisso: violó a una mujer, la tiró a un arroyo y escupió a un policía

Pese a todo eso, el implicado, un hombre de 32 años apodado “Pajarito”, está en libertad ya que la víctima, de 44, no quiso denunciarlo.

Una mujer de 44 años, que apareció en las últimas horas tirada sobre un arroyo de Berisso, denunció que fue abusada sexualmente por un hombre de 32 a quien conoce tanto de vista, como así también su nombre y su apodo: “Pajarito”. Luego, este sujeto fue capturado y, durante su arresto, arremetió contra un agente de la Policía, a quien además escupió en el rostro.


Fuentes oficiales le contaron a Trama Urbana que la víctima dijo haber sido sorprendida el pasado miércoles por su agresor, en la zona de 60 y 145. El sujeto, no está claro si amedrentándola con algún tipo de armas, la violó y luego se la llevó consigo hasta un arroyo ubicado en las calles 60 entre 143 y 145, donde la arrojó, la dejó tirada y se escapó.


Un llamado al 911 alertó a la Policía y así, un móvil del Comando de Patrullas de la vecina ciudad se acercó hasta el lugar del hecho, constatándolo. Cuando la mujer contó lo que le había pasado, se la contuvo en primer término y después la trasladaron hasta el hospital Larraín, donde fue asistida. Un poco más calmada, la derivaron al Gabinete de Abusos Sexuales de la DDI, donde fue sometida a una batería de pruebas, por orden de la fiscalía penal en turno.

Golpes y amenazas

Cometido el bestial ataque, el implicado se dio a la fuga, aunque no llegaría muy lejos: algunas horas después, ya durante la noche del jueves, fue visto mientras circulaba por 5 y 168. Los uniformados que lo divisaron se acercaron, pero no porque lo estuvieran buscando sino porque no estaba respetando el aislamiento social y obligatorio dictado por el Gobierno Nacional. Le pidieron sus datos y, al descubrir que no contaba con permiso alguno para circular por la vía pública, le dijeron que tenían que llevarlo hasta la seccional, ya que estaba infringiendo el artículo 205 del Código Penal.


En ese momento, Pajarito comenzó a insultar a los numerarios, los amenazó e intentó golpear a uno de ellos. “Le tiró una trompada a la altura del chaleco antibalas, que no llegó a generar ningún daño”, contó un calificado vocero. Sin embargo, no conforme con eso, lo escupió en la cara.


Tras un forcejeo, se logró colocarle las esposas y lo enviaron a la comisaría Primera de Berisso, liderada por Gastón Lazcano.
Allí se le iniciaron las actuaciones iniciales y después pasó por el despacho del fiscal en turno. Si bien recaen sobre él tres delitos (presunto abuso sexual, resistencia a la autoridad e infracción al artículo 205 del Código Penal) recuperó la libertad.
“La mujer iba a denunciarlo, pero se arrepintió a último momento y prefirió no hacerlo”, agregó la fuente ante este medio.
De esta manera, el hombre quedó identificado en actuaciones y regresó a su casa, ya que no hay ninguna causa en su contra.