Declaró uno de los acusados por la muerte de Lucas Lin
En la quinta audiencia, uno de los guardavidas aportó más información sobre el caso de cara a lo que será el veredicto final.
En el marco de la quinta audiencia en el juicio por el fallecimiento de Lucas Lin, declaró uno de los acusados y aportó más información sobre el caso con miras al veredicto. Se trata de uno de los guardavidas que tenía el predio ubicado en las calles 518 entre 135 y 137, donde funcionaba la colonia de vacaciones del Colegio Lincoln de La Plata.
Martín Argüelle, junto a Carolina Muro, la responsable del grupo de Lucas, están acusados de abandono de persona seguido de muerte, subsidiariamente, con homicidio culposo. Al momento de brindar testimonio, contó su versión de los hechos con detalles que hasta el momento no habían trascendido por la muerte del pequeño de 5 años ocurrida el 5 de febrero de 2019.
Lo primero que hizo fue brindarle unas palabras al papá del nene y expresó: “Lamento muchísimo todo lo que pasó, ojalá que lo que diga pueda ayudar”. Al mismo tiempo, señaló cuánto le afectó la situación a su vida personal: “He sufrido la pérdida como propia, hice todo lo que estuvo a mi alcance. Estoy a disposición para lo que quieran. El escarnio público fue muy duro, me llamaban asesino”.
En este mismo sentido, señaló que “durante dos años cerraba los ojos y veía a Lucas en el fondo de la pileta” y recordó que la pelea de Lucas por sobrevivir “fue debajo del agua, nunca vi manos, ni brazos, no hubo ningún tipo de aviso, yo no lo vi”, asegurando que el niño estuvo entre 8 y 10 minutos sumergido, y que al momento de sacarlo de la pileta ya no tenía signos vitales.
Detalles estremecedores
Entre los datos sobresalientes de la jornada, Argüelle aseguró que en la colonia, con el paso del tiempo, se iba reduciendo el personal: “Más de una vez pedí por otro guardavida, tengo entendido que de arriba (en referencia a los encargados del lugar) no lo contemplaban las autoridades del colegio, estaba yo solo para las dos piletas”.
En este mismo sentido, detalló que luego del fallecimiento de Lucas, “había una insistencia fuerte por continuar con la colonia, el colegio dio tres días de duelo y quería reabrir al lunes siguiente como si nada hubiera pasado, estábamos todos muy mal y querían seguir, me sentía presionado”.
Mientras que, sobre lo sucedido, el guardavida aseguró que “me siento responsable de todo, aunque no lo soy, faltó gente, esto se podía haber evitado. Había grupos excedidos de colonos”.
Por lo pronto, el juicio continuará con una nueva audiencia que comenzará este mediodía, donde prestará declaración un testigo de la defensa de una de las autoridades acusadas y, luego, se espera que se fije la fecha de los alegatos.