Aprovecharon que estaba en la cancha
y le abrieron el auto, de donde sacaron documentación para ver dónde vivía.
De allí fueron hasta su casa y tomaron
por sorpresa a su esposa e hijos.
Lo que iba a ser una noche de festejo y alegría se terminó convirtiendo en una verdadera pesadilla y un momento de amargura, cuando un periodista de La Plata que había viajado hasta Lanús para ver el partido de Estudiantes sufrió un hecho de inseguridad.
“Anoche sufrimos un intento de robo espantoso en La Plata que arrancó cerca de la cancha de Lanús”, comenzó contando el damnificado. “Primero robaron del auto la llave del departamento y el control remoto del portón”, agregó.
Continuando con su relato, el hombre detalló: “Supongo que utilizaron un inhibidor de señal, pero lo extraño es que cuando vuelvo al coche las puertas estaban cerradas y el control remoto no funcionaba. Sabían que hasta las 23 no regresaría a casa por el partido de Estudiantes”.
“Cerca de las 22 tres tipos entraron con la llave, tiraron al piso a mi mujer y amenazaron a los nenes de 5 y 9 años. A ellos no los pudieron calmar con nada, y como empezaron a gritarles y hasta insultarlos, finalmente se fueron sin llevarse nada”, afirmó la víctima a través de sus redes sociales.
“Calculo que esta gente no vino solo a robar a casa porque tardaron cerca de tres horas en llegar desde Lanús a La Plata. Si a algún hincha anoche lo desvalijaron, con seguridad fueron estos mismos ladrones. Dentro de todo, nosotros tuvimos suerte, aunque todavía estamos en shock”, cerró.
Cabe mencionar que hasta el momento no se sabe nada de los autores del hecho, que tuvo lugar en inmediaciones de plaza Malvinas, y está siendo investigado sobre la comisaría Cuarta. Además, se informó que afortunadamente no hubo que lamentar heridos de gravedad a pesar del mal momento vivido.
Otro detalle importante es que en 2022 su familia ya había sufrido otro hecho delictivo, más precisamente su madre. En esa ocasión, delincuentes ingresaron a su casa de 19 y 172, de Berisso, cuando no estaba.
“Revolvieron en las cuatro habitaciones, el living, la cocina. Estuvimos más de cuatro horas esperando a los peritos, con todas las puertas abiertas”. Además, detalló que “la cámara de seguridad de un vecino grabó cuando los ladrones salieron llevándose una escalera metálica desplegable, pero ninguno de los móviles los vio”, contó en aquel entonces el hombre.
No obstante, la situación no terminó allí, ya que a tan solo dos calles los maleantes volvieron a atacar, ingresando a la vivienda de nada más y nada menos que un comisario mayor. “Todo a plena luz del sol. Así estamos”, cerró indignado el hijo de la jubilada en ese momento.