Al menos 15 menores coparon el pabellón izquierdo y llegaron a cambiar un rehén por otro. Pedían celulares, protocolo Covid-19 y hasta la liberación de todos.
Momentos de extrema tensión se vivían al cierre de esta edición en el Instituto Almafuerte ubicado en Abasto, ya que al menos 15 de sus internos se amotinaron y tomaron a un asistente de minoridad de rehén, de acuerdo a la información a la que pudo acceder de forma exclusiva este diario.
Fuentes oficiales informaron que todo se inició cerca de las 22, cuando 15 reclusos alojados en el pabellón izquierdo capturaron a uno de los trabajadores. Pronto todo se transformó en un verdadero caos y hubo momentos de sumo terror, más aun cuando debieron hacerse presente unidades del SAME.
“Se amotinaron protestando por mejoras, ya que consideran que la situación allí dentro, por la que deben pasar, no es buena ni justa para ellos”, le relató a Trama Urbana un pesquisa.
En tanto, otro vocero fue más allá al indicar que “cerca de las 23, lo que querían era la liberación de todos para terminar el motín, así como que les cedan cigarrillos, fuego, celulares y que se active el protocolo de coronavirus. Además, en un momento ofrecieron dejar ir al asistente de minoridad, siempre y cuando les entregaran otro trabajador a cambio para mantenerlo de rehén”.
Este último pedido se materializó poco después de las 23. “A cambio fue otro empleado del Instituto”. En la situación, tomó intervención un juez, con el que los causantes comenzaron a negociar.
Tan grave fue el asunto que debieron hacerse presente en el centro de reclusión, ubicado en la avenida 520 y 183, agentes de la comisaría Séptima de Abasto, mientras que Omar Moya, director del Instituto de la Niñez de Buenos Aires, también se apersonó.