Noche ilegal: desbarataron fiestas clandestinas en La Plata
Las mismas se clausuraron porque no se cumplía el distanciamiento social.
La Fuerza no logra dar con los ladrones que asaltaron un kiosco y atacaron a balazos a un agente de la Policía local. Indignación entre los vecinos por la inseguridad.
15/03/2021 - 00:00hs
Todavía perdura la conmoción por la brutal balacera protagonizada por un delincuente y un policía en pleno centro platense durante la noche del sábado. Hasta el cierre de esta edición no había responsables de este hecho detenidos o identificados.
Como este medio publicó en su edición anterior, todo ocurrió cuando un ladrón ingresó con fines ilícitos a un kiosco de la esquina de 11 y 54. Encañonó al empleado y le exigió la entrega tanto del efectivo como de su celular. De esta manera, se apoderó de unos $300 y del teléfono de la víctima.
Antes de huir, la acción fue descubierta por un agente de la Policía local, que acababa de salir de un servicio y vio lo que ocurría a través de una ventana. Decidió no entrar al comercio para evitar una tragedia y entonces esperó al hampón. Una vez que él salió, se presentó como personal de la Fuerza, le apuntó, lo obligó a tirarse al piso y soltar el arma.
El malviviente obedeció, pero entonces un cómplice suyo a bordo de una moto abrió fuego contra el uniformado, quien procuró resguardarse como pudo y responder el ataque.
Se inició así un tiroteo que incluyó al menos 13 detonaciones, de acuerdo a las vainas servidas encontradas en la escena. Terminó cuando el caco a bordo del ciclomotor aceleró y escapó. Su compañero de andanzas, en tanto, volvió a agarrar su revólver y también logró huir.
“Situación catastrófica”
“Fue terrible, una balacera infernal en pleno centro y un sábado a la noche. La verdad es que pudo haber sido una tragedia. Así no se puede seguir viviendo. La inseguridad en La Plata es catastrófica, con zonas liberadas acá y allá. Pareciera que la Policía estuviera esperando a que haya un muerto para reaccionar. Nadie nos defiende”, se descargó un vecino, que oyó el intercambio de disparos desde su casa.
Su preocupación, como la de otros frentistas, es que “ni siquiera atraparon a los delincuentes. Se les escaparon ambos”. Al mismo tiempo, el hombre aseveró: “No es la primera vez que pasa algo así en ese kiosco”.
Los numerarios analizan las cámaras de seguridad para intentar dar con los implicados, de quienes nada se sabe.