11 años y algo más para un Estudiantes que sigue cosechando su siembra

Hace 11 años, el 15 de julio de 2009, Estudiantes ganó la última Copa Libertadores de América de su historia. La primera en el presente milenio, después de 39 años sin conquistas a nivel internacional.

Aquel día, como ocurrió el 16 de octubre de 1968 en Inglaterra, afloró la mística albirroja en un territorio hostil como el Mineirao de Belo Horizonte, plagado de banderas y bufandas que tenían la inscripción de Cruzeiro “Tricampeón 2009”.

En esa Copa, llamativamente, Estudiantes fue dos veces a esa cancha. La primera de ellas fue una fatídica noche de carnaval, el 18 de febrero de ese mismo año, cuando por la fase de grupos (y todavía con Astrada como entrenador) perdió 3 a 0. Ese mismo día falleció un periodista platense en el contexto de la cobertura del evento en la ciudad de Belo Horizonte.

A partir de aquella conquista, el Pincha comenzó un crecimiento deportivo e institucional que se trasladó en el tiempo con la llegada de Juan Sebastián Verón como presidente en el año 2014.
Si bien después de aquella vez no volvió a clasificar más allá de los cuartos de final de una Copa internacional, cambió el paradigma en la formación de jugadores y en el armado de la estructura del fútbol amateur y profesional.

Desde enero de 2013 (tres años y medio después) Agustín Alayes y Sebastián Verón tomaron la posta de todo el fútbol del club, que ayer decidió anticiparse a esta fecha especial ratificando el camino de proyección de juveniles como sello distintivo del modelo de gestión.

Aquel Estudiantes, por ejemplo, apenas tenía un poco más de 25 mil socios. Hoy tiene 40 mil. No había entrenadores de arqueros o preparadores físicos para todas las categorías, sino que se los iban compartiendo. Hoy están todos los cupos completos. Apenas se insinuaba tener un instituto secundario y jamás se pensaba en un terciario Universitario. Hoy todo eso funciona en el Country.

El club, ayer, decidió promocionar y renovar los contratos de David y Andrés Ayala, como también del defensor central Guzmán, a quien el Chavo Desábato (otro campeón de aquel equipo) observó muy bien en su paso por la Reserva.

Por el resto habrá que esperar, porque son más especulaciones que definiciones.