El mejor arranque de la historia Pincha

Las diez primeras fechas del equipo de Vivas se convirtieron en el inicio de torneo más efectivo. Tiene el 86,6% de los puntos en juego y supera a campañas legendarias como las de Zubeldía o Sabella

Puntero y único invicto del campeonato, ocho meses y 21 partidos sin derrotas en Primera división (a seis de alcanzar la máxima de 27, lograda entre 1967 y 1968), catorce meses sin caer en el Estadio Ciudad de La Plata. Números de una campaña que pone al plantel de Nelson Vivas a la altura de equipos legendarios como los de Alejandro Sabella, Osvaldo Zubeldía o el bicampeón de Bilardo y Manera.

Sin embargo, los de Vivas fueron por más y el sábado contra Colón escribieron otra página en la historia futbolística de Estudiantes: el triunfo ante el Sabalero transformó a la actual campaña en el mejor arrandel Pincha en un torneo oficial a lo largo de toda su historia.

Es que las ocho victorias y los dos empates sumados hasta ahora igualaron la marca del único torneo en el que Estudiantes llegó a la fecha 10 como invicto (el Nacional 1967, cuando se consagró subcampeón sin derrotas). Sin embargo, lo superan en efectividad, ya que la campaña de esta temporada alcanza el 86,6% de los puntos, contra el 85% que alcanzó aquel plantel de Zubeldía, con siete victorias y tres empates en las primeras diez jornadas.

Con esta última efectividad, aparece a la par la otra gran campaña de aquel año bisagra, la del Metropolitano que Estudiantes hizo propio venciendo en la final a Racing; además de la lograda en el Metro del 84, con Eduardo Manera, que estuvo invicto las primeras nueve fechas y recién cayó en la décima ante Argentinos Juniors, sumando ocho triunfos, un empate y una derrota.

Enseguida se asoma la campaña del campeón 2010 de Sabella, que tuvo otro arranque demoledor en la primera mitad del Apertura y también acumuló ocho triunfos, un empate y una caída, con el 83,3% de los puntos en juego.

Más atrás en la historia, para encontrar antecedentes similares hay que bucear en la era amateur, en los primeros años de Estudiantes en la máxima categoría: el campeón de 1913 cosechó una suma similar a la actual, llegando invicto a la jornada diez; y en el Campeonato de 1915 tuvo otro comienzo arrollador, con ocho plenos, un empate y una derrota.