Un hecho histórico, tras una larga lucha.
Tras seis años de lucha, la Federación de Fútbol de Estados Unidos y la selección femenina nacional llegaron a un acuerdo salarial para que los combinados de hombres y de mujeres reciban el mismo salario. Las jugadoras recibirán una indemnización de 24 millones de dólares y tendrán el mismo sueldo que el seleccionado masculino por los encuentros internacionales.
Cabe señalar que se trata de una disputa de larga data, ya que la primera queja de discriminación salarial se presentó en el 2016 ante la Comisión de Oportunidades e Igualdad en el Empleo de Estados Unidos (EEOC). Tres años más tarde, y por el mismo motivo, las jugadoras de la selección norteamericana denunciaron a la Federación.
La selección femenina, campeona mundial en Francia en 2019, había presentado una demanda colectiva contra la política de la USSF. “U. S. Soccer se ha comprometido a ofrecer la misma remuneración a las selecciones nacionales femeninas y masculinas en todos los amistosos y torneos, incluido el Mundial, a partir de ahora”, detallaron en el acuerdo.
Luego de este acuerdo, la Federación y el seleccionado aseguraron mediante un comunicado que trabajarán en conjunto para “avanzar en la igualdad” en el mundo del fútbol.