Ayer fueron designados los árbitros para la fecha 23 y Darío Herrera será quien impartirá justicia el domingo en el Bosque. El juez tiene saldo positivo con Gimnasia y Estudiantes, como así también ya dirigió dos clásicos.
A pesar de los deseos por el Lobo y el Pincha para que Patricio Loustau fuera el árbitro del clásico platense este domingo a las 17 en el Juan Carmelo Zerillo, la Liga Profesional ayer al mediodía designó los jueces para esta fecha 23 y finalmente será Darío Herrera el juez para este enfrentamiento vital entre los dos equipos de la ciudad. En dicho duelo no solo se juega un nuevo derbi, sino también que los dos definen sus chances para clasificar a las Copas internacionales del año que viene.
El neuquino, que viene de una fecha complicada ya que luego del encuentro entre Lanús y Racing denunció a Lautaro Acosta por amenazas en el vestuario, tendrá la oportunidad de dirigir por tercera vez el clásico entre Gimnasia y Estudiantes. El último clásico jugado en marzo fue dirigido por el nacido en Andacollo y, al igual que el primer antecedente que fue en 2016 cuando jugaron en el Bosque, salió 0-0.
Herrera dirigió al Tripero en 28 oportunidades donde el Albiazul consiguió 13 victorias, 9 empates y 6 derrotas. Al León lo arbitró en 15 encuentros y allí el Albirrojo cosechó 7 partidos ganados, 6 empates y tan solo 2 derrotas, mientras que el último antecedente para los dos equipos es el clásico disputado en el Jorge Luis Hirschi donde no se rompió el marcador.
De esta manera, es un juez que cuenta con buenos resultados para ambos equipos y que en los dos clásicos donde le tocó impartir justicia no tuvo problemas ni jugadas polémicas, salvo la doble amarilla a Harrinson Mancilla en 1 y 57 que desde el Mens Sana creían apresurada, ya que fue un resbalón del colombiano, pero no ha quedado marcado por ninguno de las dos instituciones como un mal árbitro.
Sin embargo, se espera por la conferencia de los técnicos en la previa para ver si tienen alguna opinión respecto a la designación ya que por parte de Gorosito había afirmado que le gustaba Loustau.