El capitán de la Selección está a tan solo tres tantos de alcanzar el récord de 643 goles que anotó el brasileño en un solo equipo: lo hizo en el Santos de las décadas de 1960 y 1970. Sin embargo, el rosarino podría no alcanzar esa marca si dentro de 35 días anuncia su salida del Blaugrana.
La vida deportiva del astro argentino va, por momentos, de un extremo a otro. En esta temporada 2020-2021, Messi pasó de ser cuestionado por su rendimiento físico y por marcar solo goles de penal a quedar a tres tantos del récord del mítico Pelé tras su último doblete al Betis en La Liga. Es lo que tiene su incontrolable efervescencia goleadora. La Pulga suma 640 goles en 741 partidos como jugador del Barcelona, quedando a un hat trick de Pelé, que con 643 en 757 encuentros con el Santos ostenta la etiqueta de máximo goleador de un jugador profesional en un mismo club. Un récord aún vigente 50 años después.
El exdelantero brasileño, considerado por la FIFA como el mejor jugador del siglo XX y apodado “O Rei”, sigue siendo el rey. Messi tiene, por tanto, una posibilidad a tiro para seguir incrementando su vitrina de récords batidos.
Tras la derrota por la mínima ante el Atlético Madrid del Cholo Simeone, el delantero argentino alcanzó los 800 partidos entre oficiales y amistosos, lo que comporta un promedio gol de 0,85 por encuentro. Messi debutó con el Barcelona el 16 de noviembre de 2003 en un duelo amistoso ante el Oporto, que sirvió para inaugurar el Estadio do Dragao.
Después de expresar su deseo de marcharse y finalmente seguir en el conjunto catalán a causa de la negativa de negociarlo con otros clubes, el astro argentino aún tiene la posibilidad de acabar su carrera en el mismo equipo que la empezó y de forma ininterrumpida, algo imposible de pensar en la actualidad y mucho menos entre los mejores jugadores de la historia del fútbol.
A los 33 años, Maradona demostraba en el Sevilla que ya nunca más sería tan estratosférico como lo fue en el Nápoles y estaba a punto de ser suspendido por doping por segunda vez; Pelé se preparaba para dejar el club de su vida, el Santos, rumbo al New York Cosmos; Cruyff llevaba dos años en Estados Unidos después de marcharse del Barcelona, y Cristiano Ronaldo se iba a la Juventus tras nueve años en el Real Madrid. Lionel Messi, mientras tanto, es el rey del fútbol mundial de los últimos 15 años.