Con una gran cantidad de bajas y algunos refuerzos, el Bochi aguarda por el
comienzo de la pretemporada con un plantel bastante renovado.
El primer equipo de Villa San Carlos realmente atraviesa un momento de mucha calma, ya que hace bastante tiempo dejó de competir, y actualmente se encuentra licenciado, a la espera del comienzo de la pretemporada, el próximo 3 de enero, en el predio del Sindicato de Empleados de Comercio. Más allá de la calma lógica por no tener actividad futbolística, sigue siendo un presente activo para el entrenador Lucas Licht y los encargados del fútbol villero.
Es que es una instancia, el final del año, donde se empieza a confeccionar el grueso del grupo superior que buscará competir de una mejor manera en el próximo año; ya que en este 2023, de la mano de Leandro Martini, no alcanzó para clasificar al Reducido. Esto fue porque hubo una racha de más de 10 partidos sin ganar, coqueteando en algún momento con el último puesto, que le terminó quedando a Ituzaingó, el único descendido a la Primera C Metropolitana, divisional donde competirá Defensores de Cambaceres.
Con la misión de cambiar la cara, la Comisión Directiva optó por darle la confianza al Bochi, que luego de su retiro tendrá la posibilidad de empezar a hacer sus primeras armas como entrenador, desechando una propuesta de Gimnasia, el club de su vida, para ser parte del Departamento de Fútbol junto al gerente Marcelo Gauna. El flamante DT intentará dar la talla, aunque habrá que ver cuál será su propuesta como cabeza de grupo.
Celeste renovado
Como bien marcó diario Hoy líneas atrás, se vendrá un lavado de cara importante en el plantel principal. En ese sentido, el director técnico y sus colaboradores no podrán contar en el 2024 con los arqueros Manuel Peralta Salinas y Franco Lo Tártaro. Por su parte, tampoco seguirá el defensor Julián Cosi, los volantes Matías Sproat, Maximiliano Badell y Axel Paiva. Finalmente, otro que se marchó es el delantero Matías Linas.
Todos ellos rescindieron su contrato con el Celeste. La única excepción es la de Paiva, que estaba a préstamo y debe regresar a Temperley, equipo de la Primera Nacional.
Por último, es probable que antes del 31 de diciembre exista alguna salida más, en una recta final del año donde se espera un gran recambio en el plantel.
Ante la salida de Linas, como también la de Emanuel Zagert a mediados del año, perdió mucho poder de fuego en ofensiva; es porque el club sumó al delantero Valentín Fernández, que viene de jugar la última temporada en Independiente de Chivilcoy y supo defender la camiseta de Estudiantes en divisiones inferiores. Así las cosas, se esperan más refuerzos para lo que viene.