LISFI no abandona a sus pibes en tiempos de crisis

Sergio Escamochero, el presidente que cumplió 11 años al mando de la Liga Sur de Fútbol Infantil (LISFI), hizo una síntesis de los cambios instaurados en el presupuesto para seguir un campeonato que se rige por la pasión de 46 clubes totalmente amateurs. En qué ayudan, qué pudieron sostener y qué dieron de baja en el presupuesto. Un enamorado del fútbol infantil que surgió en uno de los equipos más modestos, Nueva Fuerza

Alrededor de 4.500 pibes cada fin de semana hacen rodar la pelota. Atrás de ellos están papá, mamá, tíos, abuelos y amigos. “El movimiento de gente en toda la región es muy imprtante y trabajamos para que eso suceda con la mayor normalidad”, dice con la convicción de quien ama y quiere ver crecer una obra que puso su escudito en 1982.

“La crisis nos hace trabajar con un presupuesto pre establecido. Y si bien hemos tenido que suspender algunos ítems que teníamos programados, lo que no tocamos son los viajes a la Costa para la Selección y la entrega de una bicicleta a cada una de las 46 instituciones”

Sergio Escamochero habla con la pasión del primer día, cuando allá por 1993 (¡hace 25 años!) llevó a su hijo para jugar en la categoría ’90 del club de Melchor Romero.

“Debido a la crisis económica, hubo temas que bajamos del presupuesto anual, como las obras de infraestructura, o algún aparato para informática que veníamos renovando periódicamente. Pero el beneficio para los chicos y las instituciones no se han tocado”, afirmó.

Ánimo

Los valores en la infancia resaltan fácilmente. Y quien no se comporta como dice el sentido común, más salta a la luz. Una liga independiente que no depende de AFA ni de su Consejo Federal, debe hacer un esfuerzo maratónico para no desalentarse en un viaje que depende de las voluntades personales. 

“Se puedo sintetizar en una palabra: continentes. Eso somos. Primeramente para los chicos, después para las instituciones, y en el grado que podamos hacerlo para con algunas familias”, virtió en palabras el espíritu solidario de la entidad que preside.

Que su estadía y su paso por LISFI podamos acompañarlos. Es la línea estatutaria que tratamos de respetar y de hacer respetar.

Compañía

Los vaivenes de la vida son incontrolables, impredecibles, como la jugada de un delantero con el arquero y varios defensores a los que deberá sortear en la aventura más linda de este juego: el gol.

“La época de las inundaciones nos puso en un lugar en el que se trabajó solidariamente junto a las instituciones, porque todo lo que hace la Liga, ésta no lo hace sola, sino con el aporte de cada una de sus afiliadas”, recordó Sergio, quien desde su primer día en el fútbol, supo que estaría a disposición para todo tipo de colaboración. 

“Lo hice desde cualquier lugar, en mi club de origen, colgando los trapos o marcando la cancha, hasta cuando por primera vez me citó el Consejo Directivo de LISFI, con la recordada figura de Miguel Vecchio, donde empecé llevando y trayendo papeles, me senté en la mesa de entradas, pasé por el sector fichaje, por la protesorería; todo el funcionamiento de la Liga  porque he estado en todos los cargos. Hoy, el hecho de que sea presidente, no quita que  tenga que firmar una solicitud o atender el fichaje para alguna afiliada”, repasó el hombre.

Unicidad

Consultado sobre qué pasa cuando un club no puede cubrir gastos, sintetizó que “no cersenamos el derecho de los chicos a participar por el hecho de no tener una cuota al día. El chico debe jugar, desde marzo a diciembre. Después será cuestión de grandes, de dirigentes, de solucionar el tema que fuera, económico o discplinario”

Respecto a cada club, reconoció que “no todos funcionan de la misma manera y sus arcas están florecientes, pero tratamos de solucionar en parte el problema, con un eslogan que tratamos de poner en práctica y es que “el que golpee la puerta de Presidencia por una inquietud o duda, siempre se irá con una respuesta”. Y aunque esa no sea 100% satisfactoria, al menos tendrá una oportunidad más para ver si el problema que trajo es solucionable por el Consejo Directivo o con alguna otra herramienta”.

Solidaridad

Otro valor común que tiene el ambiente de los pequeños es la ayuda mutua. Esta virtud no fue en decaída, al contrario, se hizo un factor natural y condición indispensable para la salida a los temas más desafiantes de cada momento.

Sergio, como titular liguista, pidió cerrar el reportaje con un llamado a todos los equipos con categoría 2007 y 2008, para participar el domingo en la cancha de Deportivo Gimnasista de Berisso. “Esta afiliada está llevando a cabo un plan para la inclusión de niños con capacidades diferentes. Y este domingo se dará un encuentro muy importante, cerca del Centro Cívico, en calle 12 y 168.