La familia albirroja copó el estadio Mario Alberto Kempes para acompañar al conjunto comandado por Eduardo Domínguez en otra final. Pese a que el resultado no fue el esperado, los simpatizantes del León despidieron a sus jugadores con aplausos.
Cerca de 750 kilómetros separan a la ciudad de La Plata del Mario Alberto Kempes. Pese al día y las inclemencias del tiempo, más de 10.000 almas albirrojas llegaron a Córdoba para acompañar a su querido
Estudiantes en otra final. River se quedó con la Supercopa Argentina por 2-1 ante el Pincha en un estadio repleto. Y como ya es costumbre, los hinchas albirrojos le pusieron color y pasión para alentar a sus jugadores.
La semana empezó con alertas por lluvias y tormentas en el centro del país. El partido pactado para la mitad de semana era otra complicación para los hinchas de ambos clubes. De todas formas, la pasión pudo más y los simpatizantes albirrojos se las ingeniaron para llegar a Córdoba. Por tierra o por aire, cerca de 12.000 hinchas del Pincha dijeron presente en el Mario Alberto Kempes.
La primera ovación de la noche se la llevó Enzo Pérez, en lo que fue un duelo más que especial. El entrenador de Estudiantes también recibió el afecto de una hinchada que alentó de principio a fin. Al igual que sucedió en la recordada semifinal ante Boca por Copa Argentina, más de 40 micros con hinchas del Pincha fueron demorados a 200 kilómetros de la ciudad. Por ese motivo, la popular asignada al club platense se terminó de colmar con el partido empezado.
Tras el encuentro, diario Hoy tomó contacto con Pablo del barrio La Loma: “Llegamos con mucha ilusión y nos vamos tristes. No tenemos nada para reprocharle al equipo y tampoco al técnico. Un desvío y un golazo nos dejaron sin copa. El equipo se cayó cuando salieron Enzo y Sosa, pero creo que en el alargue podría haber pasado cualquier cosa”.
Micaela de Los Hornos también charló con el diario de la gente y expresó sus sensaciones al retirarse del estadio: “Volvimos a copar como en todas las canchas. Sabíamos que River tiene grandes jugadores y en algún momento te lo hacen sentir. No entendí algunos cambios de Domínguez. Pero la verdad que la copa pudo quedar para cualquiera. Ahora a levantar cabeza que se viene la Libertadores”.
“Poné a los pibes”: el pedido de la gente de River a Demichelis
Los hinchas de River que viajaron en procesión a Córdoba para ver la final de la Supercopa Argentina ante Estudiantes explotaron contra el entrenador en un momento clave del partido. Mientras el reloj llegaba a los 15 minutos del segundo tiempo, la tribuna del Millonario comenzó a pedirle al DT que pusiera a los juveniles por la falta de respuesta de su equipo.
La primera mitad de la Banda no había sido muy prolífera. Apenas contabilizó un remate al arco de Miguel Ángel Borja, que contuvo soberbiamente el arquero pincharrata Matías Mansilla. Antes de salir al complemento, el director técnico del Millonario dispuso el ingreso de Santiago Simón en reemplazo de Leandro González Pirez. Sin embargo, a River le costó revertir el resultado, que estaba 1-0 en favor del León gracias al tempranero gol de Javier Correa. La hinchada, cansada, empezó a cantarle al DT “poné a los pibes”, seguido de un conocido insulto del lunfardo argentino.
Al cabo de un puñado de minutos, Demichelis mandó a la cancha a Claudio Echeverri, la joya de 18 años vendida a Manchester City a cambio de 24 millones de euros, y Rodrigo Villagra, el mediocampista de la categoría 2001 que llegó procedente de Talleres en el último mercado de pases.