Con Romero en nuestro país, el equipo de Balbo va tomando color para lo que será el 2023, aunque el entrenador
todavía quiere sumar algunas caras nuevas.
El plantel profesional de Estudiantes de La Plata comenzó con la tercera semana de pretemporada, donde el cuerpo técnico comandado por Abel Balbo sigue metiéndole su impronta al grupo superior. Este quiere realizar un gran año en el 2023, con la Copa Sudamericana como gran condimento en el horizonte.
En ese sentido, el flamante entrenador del conjunto albirrojo ya dispuso que los futbolistas realicen fútbol formal y viene parando equipos mezclados, aunque uno de ellos tiene nombres propios más que interesantes.
El dibujo primario es 4-1-3-2, con estos intérpretes: Mariano Andújar; Leonardo Godoy, Ezequiel Muñoz, Luciano Lollo, Emmanuel Mas; Jorge Rodríguez; Matías Godoy, Fernando Zuqui, Franco Zapiola; Pablo Piatti y Mauro Boselli.
Luego, el DT probó con otros dos equipos, que tuvo a José Sosa, Deian Verón, Daniel Sappa, Juan Cruz Guasone y Benjamín Rollheiser, entre otros tantos futbolistas que componen el plantel superior, que quiere llegar de la mejor manera al 2023 y ganarse un lugar en la consideración de Balbo.
Y va el tercero
Luego del arribo de Guasone y Godoy, el Departamento de Fútbol abrochó la llegada del defensor central de Liga de Quito de Ecuador, Zaid Romero, que en las próximas horas se sumará a los entrenamientos en el predio Mariano Mangano de City Bell. El zaguero, con pasado en Godoy Cruz de Mendoza, ya se despidió del club ecuatoriano y arribó a nuestro país, para primero pasar la revisión médica y luego firmar su contrato con Estudiantes.
Romero, de 23 años, firmará un contrato hasta diciembre de 2026. El León adquirió el 50% de su pase.
Condimento a la Sudamericana
Se conoció que habrá una especie de repechaje entre los que terminen segundos de cada grupo, con los equipos que lleguen como terceros de la Copa Libertadores. Allí, deberán jugar un encuentro ida y vuelta para eliminarse, por lo cual es una oportunidad importante para el Pincha, como también para el Lobo, en caso de que las cosas no vayan como uno lo espera y haya que luchar con uñas y dientes un poco más.