Noguera, la torre que gana en las dos áreas

Luego del clásico ante Gimnasia en el Bosque, y ya con las revoluciones un poco más bajas, uno de los goleadores de la tarde del domingo para Estudiantes, Fabián Noguera, dialogó en exclusiva con diario Hoy. El zaguero del Pincha se refirió a la reciente clasificación a la Copa Libertadores, su olfato goleador y hasta se animó a responderle a aquellos que critican el juego de Estudiantes. “De los que hablaron ninguno nos pudo superar. Gimnasia terminó pidiendo la hora”, afirmó el jugador.

—¿Cómo se explica un clásico con ocho goles?

—Fue raro. Entretenido para el hincha neutral, pero para el que era de Gimnasia o Estudiantes fue un sufrimiento. Creo que los dos equipos aprovecharon los errores y las llegadas, y por eso se dio de que haya tantos goles. Se optó más por el golpe por golpe que por otro juego y se terminó dando un partido muy abierto.

—Tu gol tal vez termina siendo más importante que el de Díaz, ¿no?

—Sí, porque además fue a los 20 minutos del segundo tiempo, algo que nos permitió tener un margen para ir a buscar el empate. Ellos se pudieron haber agrandado después del cuarto gol, pero el gol mío frenó ese envión.

—El olfato goleador...

—Siempre trabajo para aportarle, más allá de lo defensivo, una cuota goleadora al equipo. Tengo las características de hacerme fuerte arriba en el juego aéreo, tanto en ataque como en defensa. Pero obviamente tengo un olfato goleador porque pude hacer varios goles como el del clásico con Gimnasia. Me queda una sensación muy linda.

—¿Qué se habló en el entretiempo?

—Hablamos mucho. El Ruso (Zielinski) se encargó de acomodar las piezas y hacer los ajustes necesarios. Mariano (Andújar) también, tiene una experiencia increíble en los clásicos y nunca perdió. Trató de transmitirnos tranquilidad, saber de que podíamos empatarlo a pesar de estar dos goles abajo y fue uno de los responsables para poder lograr la igualdad.

—¿Notaron a Gimnasia nervioso cuando se pusieron a uno?

—A Gimnasia le jugó en contra lo psicológico. Sinceramente me sorprendió mucho que ellos hayan guardado tantos jugadores la fecha anterior. Ellos sabían que era el partido del año y creo que les pesó esa responsabilidad de tener que ganar sí o sí. En el 4 a 2 en contra sacamos relucir toda nuestra hombría y nuestra mejor versión. Creo que si el partido duraba cinco minutos más lo ganábamos. Nosotros cuando hicimos el tercero notábamos que lo íbamos a empatar y el rival también.

—¿Por qué creés que los protagonistas de los otros equipos critican tanto el juego de ustedes?

—No lo sé, con River jugamos dos veces en el año, uno lo ganamos y en el otro empatamos pero hicimos figura a Armani. Vélez no nos llegó una vez al arco y Gimnasia terminó el clásico pidiendo la hora. Entonces puede no gustarle nuestro juego, pero ninguno nos pudo superar. Estaría bueno que hagan una autocrítica antes que fijarse tanto en nosotros.

—¿Tu opinión sobre las declaraciones de Díaz?

—Fueron desafortunadas. Creo que se dieron por la vorágine del encuentro, pero estuvo mal. Lo charlamos, reconoció el error y pidió disculpas. Igualmente me gustaría que, como se le cayó a él, se haga lo mismo con el presidente de Gimnasia, Gabriel Pellegrino, que trató a una persona con mucho desprecio y lo hizo con palabras muy agraviantes sentado en el living de su casa.

—Otra vez en la Libertadores...

—Festejamos el punto que nos dio la clasificación a la Copa. Es una alegría muy grande. En la Copa del 2018 creo que pudimos haber avanzado una o dos rondas más, pero el fútbol no son merecimientos, sino que tiene que entrar la pelota. Ahora volver a poder estar en el máximo certamen de América, con Estudiantes y que se vuelva a ver en el estadio de Uno con los hinchas va a ser algo muy lindo.