Alan Sabbagh y Hernán Casciari estrenan El mejor infarto de mi vida
La dupla revela detalles de la esperada producción que tiene participaciones especiales de Rita Cortese, Imanol Arias, Eleonora Wexler y Olivia Molina, entre otros.
entrevistaLa dupla revela detalles de la esperada producción que tiene participaciones especiales de Rita Cortese, Imanol Arias, Eleonora Wexler y Olivia Molina, entre otros.
24/01/2025 - 00:00hs
Inspirada en hechos reales y basada en el libro homónimo del escritor argentino Hernán Casciari, El mejor infarto de mi vida llega hoy en exclusiva a Disney+ con sus seis episodios. Para conocer más sobre esta comedia dramática, hablamos con Casciari y Alan Sabbagh, que encarna a Ariel, alter ego del conocido escritor.
—Cuando te convocaron para ser parte de este proyecto, ¿qué fue lo primero que se te cruzó por la cabeza?
—Alan Sabbagh: No mucho porque no sabía de la historia, estaba desinformado. Sabía de Hernán, de todo lo que hacía, pero no de la historia ni que se había infartado. No sabía nada. Leí El mejor infarto de mi vida y ya el título me gustó. Veo dejadez, veo redención, veo esperanza, y automáticamente lo leí y no hubo mucho más para hacer que hablar del proyecto con los directores, avanzar e ir a contar esto que está buenísimo. Y contarlo lo más verdadero posible, lo más fiel al guion, que es una versión de la historia. Encantado de entrada de saber que estaba involucrado tanto Disney como Pablo Bossi, que es una eminencia; Mariana Wainstein, la directora; y el elenco que se fue armando fue brutal para mí. Una experiencia divina.
—Y a vos te dijeron, vas a ser Alan, ¿sí o no?
—Hernán Casciari: Sí, yo no tenía ni opción de decir sí o no.
—Pero uno puede decir che, está bueno, o quería George Clooney…
—HC: Yo entregué la cesión de derechos y les dije: No quiero saber nada, no me cuenten nada, no me pregunten nada. Ahí tienen el libro, tienen lo que pasó, la reseña, hagan lo que quieran. Un día me dijeron que el protagonista iba a ser Alan Sabbagh y dije: Ay, gracias. Mirá si decían Luciano Castro, o ponían uno que tenía que dar bien en cámara, lindo. Ahí se alejaría de lo que a mí me parece que tiene que ser el personaje. Tiene que ser un personaje más parecido a nosotros. Lo admiro mucho.
—¿Se juntaron? ¿Charlaron?
—AB: Jamás.
—HC: Nos vimos por primera vez el último día del rodaje y hoy para las notas.
—Pero ¿vos hiciste como una investigación?
—AB: Muy poco porque cuando me explicaron que le pasó a Hernán... pero no es Hernán, quédate tranquilo, hace la tuya y ahí dije: Vamos a apostar a lo que hice yo.
—HC: Para mí esa fue una de las grandes decisiones, hay muchas, pero esta me parece fundamental, escindir al personaje Ariel, poeta, con sus problemas, de mí. Me parece que es importantísimo que esa parte de la historia esté teñida de una ficción y que, en cambio, Javier y Alejandra, los que me salvan la vida, sean Javier y Alejandra y se llamen igual. Porque me parece que ahí hay un protagonismo épico, que si tienen que parecerse a las personas que hicieron algo. Yo no hice nada, o sea, el gordo se infarta, estos hacen algo de verdad y me parece que está bien, que los nombres reales sean de ellos.