César Jones, un profeta en su tierra

Nacido en La Plata, el cineasta César Jones comenzó su oficio como realizador XXX en el transcurso de su carrera universitaria y ahora se encuentra frente a su propia productora que lanzó su contenido más reciente. Es por ello que el realizador dialogó con este multimedio sobre sus proyectos.

—¿De qué manera se aborda la dramaturgia en el cine erótico? ¿Cómo lo definirías?

—Hay dos vertientes básicas: la argumental y la gonzo. Es decir, aquella que, justamente, desprecia el argumento en favor de la pura acción sexual o del uso de las situaciones reemplazando a la trama como tal. En medio, una amplia paleta de grises, desde ya.

—¿Cómo llegaste al género? ¿Bajo qué circunstancias te adentraste en este arte?

—Jugando, junto a un grupo de compañeros, amigos de la carrera porque estudiamos y nos recibimos de realizadores audiovisuales en la Facultad de Bellas Artes de La Plata. Allí, tal vez porque el porno aparecía como una gama jerarquizada del espectro de cine que mirábamos por entonces. Ergo, fue muy natural que alguien de aquel grupo (ya no recuerdo quién, quizás fui yo) en algún momento verbalizara esa especie de caldo que se venía cocinando en el backstage del inconsciente, (por lo menos en el mío seguro), y dijera: “Che, ¿por qué no hacemos una porno?”; a lo que todos respondimos “sí”, porque nos pareció muy natural, finalmente se hacía verbo, era como un fruto cayendo del árbol.

—¿Cuáles fueron los cambios que se dieron en esta industria con el advenimiento de la posmodernidad? ¿Y en las nuevas tecnologías?

—La industria empezó posmoderna, de hecho. El mayor y más crítico cambio lo supuso el emplazamiento de internet como el lugar jerarquizado y casi único donde traficar todo tipo de experiencias y bienes culturales, entre ellos el porno, por supuesto. A partir de allí, fue tal la transformación que ocurrió al género que un filme triple X de los 70 se parece más a un filme mainstream actual que a un filme actual de su propio género, solo como para dar una idea del alcance y espesor de la mutación.

—¿A qué definirías como porno de autor?

—A cualquier producción en la que el realizador vuelque su presencia con iguales dosis de malicia y autenticidad.

—¿Qué balance hacés sobre el camino andado?

—En unos días mi productora LPsexxx Realizaciones comenzará a transitar su vigésimo cuarto año de actividad en el género e irá por su producción n° 23. No me puedo quejar.

—¿Cuáles fueron las últimas producciones en tu haber? ¿Qué recepciones mantuvieron?

—Acabo de lanzar comercialmente Putas y reincidentes 2; la repercusión viene siendo excelente, por suerte. La peli inmediatamente anterior a esta se llama Vicios de familia 3: las depravadas, y también recorre un venturoso camino comercial, alabado sea Dios.

—¿Por qué recomendarías al público que vea tu obra?

—Porque necesito dinero.