En diálogo con diario Hoy, el músico presentó su primer trabajo como solista titulado Parcialmente nublado, que cuenta con nueve canciones
Reconocido como parte fundamental del proyecto Julio y Agosto, el cantante Mogue abandonó este camino para iniciar otro como solista y hoy celebra Parcialmente nublado, su primera producción como tal que recorre el género pop.
El material grabado entre 2020 y 2022 cuenta con nueve canciones, y al respecto el artista vaticinó: “De alguna forma el disco busca hacerle frente a la incertidumbre absoluta, yendo a buscar respuestas donde sea que se encuentre un resguardo colectivo: desde Bola de Nieve hasta Boy Pablo, desde el folklore hasta la música urbana. Las baterías programadas, los secuenciadores, sintetizadores y el Auto-Tune conviven con guitarras, pianos, bongós y bombos legüeros. En esa mezcla el disco termina por encontrar su identidad”.
—¿Qué material estás presentando en estos momentos?
—Después de la separación de Julio y Agosto empecé a componer canciones solo en mi casa, preproduciendo con la computadora, no tanto con la guitarra y en la sala como estaba acostumbrado con la banda. Empecé a trabajar con Juan Stewart como productor y darles forma a esas maquetas que con el tiempo fueron tomando forma de álbum y terminó en Parcialmente nublado, lo que estoy presentando hoy. El proceso fue bastante divertido y me animé a probar bastantes cosas nuevas.
—¿Qué concepto mantiene esta producción que inaugurás como solista?
—No suelo trabajar con conceptos como puntos de partida. Me gusta componer y trabajar y que el resultado me vaya sorprendiendo. Y recién ahí, si todo va bien, encontrar un concepto que unifique. Hay algo que sobrevuela todo el disco y es como un sentimiento de incertidumbre y de quietud, de algo que está a punto de estallar.
—¿Cuáles son las sensaciones que te rodearon al crear este disco y ahora al lanzarlo?
—Fue una gran aventura hacerlo. Después de tantos años con Julio y Agosto (que además de mis amigos son casi como mi familia) trabajando codo a codo, tomando decisiones en conjunto y respaldándonos siempre como un equipo, pasé a tomar todas las decisiones en solitario, con todo lo bueno y lo malo que eso implica. Me costó muchísimo y me sigue costando ahora a la hora de armar la presentación en vivo. De todas maneras estoy contento. Fue y sigue siendo un gran aprendizaje. Ahora estamos ensayando las canciones con una banda para la presentación del disco el domingo 23 de octubre en La Tangente.
—¿Cómo elegiste el repertorio?
—Fue bastante orgánico. No soy un compositor tan prolífico, así que las canciones que quedaron afuera son muy pocas.
—¿Cómo te atraviesa el arte?
—Qué difícil. La vida es muy mundana, creo que mucho más de lo que me imaginaba, así que el arte me ayuda a adornarla y sumarle capas y diferentes significados a las cosas.
—¿A qué le cantás?
—Me gustan las cosas simples, cotidianas. Una fiesta, un paseo, la quietud de los días en mi casa, un desencuentro con otra persona, los miedos y las ansiedades.
—¿Qué análisis hacés de la escena musical actual?
—Me cuesta pensar en una única escena musical actual. Creo que algo bueno de la actualidad es que hay espacios y público para todos o casi todos. Hay muchas microescenas (y no tan micro) y todas conviven en simultáneo.