“Debemos procurar construir un mensaje que nos haga mejores personas”
En diálogo con diario Hoy, Diego Romay se expresó sobre la importancia de reflexionar sobre los vínculos en el teatro y presentó la plataforma vuelvenlosabrazos.com.
A días de debutar como uno de los jurados del Cantando 2020, el multifacético artista contó a diario Hoy detalles sobre su regreso a la televisión, sus shows de streaming y cómo se prepara para los 30 años de Drácula: el musical.
21/07/2020 - 00:00hs
Con el arte en sus venas, Pepe Cibrián Campoy, supo conquistar al público con su humor, gracia y talento, impulsando los proyectos más importantes de la escena musical local. En diálogo con diario Hoy habla de su presente, aún en pandemia, imparable. “Soy un hombre de teatro, nací en el teatro”, afirma.
—Esta cuarentena viene movida, con mucho trabajo, ¿cómo lo vivís?
—Como un gran privilegio, porque ante esta situación espantosa que están viviendo y pasando la gran mayoría de las personas, de nuestros compatriotas, poder dar clases por Zoom y que ahora me convoquen para el Cantando, que me divierte tanto y me parece tan graciosa experiencia. Me parece mágico, maravilloso, soy un hombre con mucha suerte.
—¿Le vas a escapar al escándalo?
—Hay gente que lo ha vivido sin escándalos, como por ejemplo Patricia Sosa, que lo hizo durante mucho tiempo ¿recordás algún escándalo de ella?
—No…
—Yo creo que siempre los escándalos o cuando la gente se entera es porque uno quiere que pase, me casé con Santiago y nadie lo supo hasta que lo dije. El escándalo es parte de hacerlo mutuo, es un juego, yo no creo ser merecedor de que me digan nada que me pueda afectar y si sufriese mucho me iría, no tendría problema en irme. No vale la pena. Más cuando uno pasó todo, con 72 años, dos cánceres, perder a los seres amados, todo es más relativo, me generan otras cosas alegrías, hablo ahora suponiendo pero espero que no pase eso.
—Igual si llega a pasar, desde tu experiencia y tu capacidad de argumentar se supera…
—Obvio, lengua tengo para manejarlo (risas).
—Además del Cantando y las clases estás con espectáculos online ¿cómo surgió eso?
—Porque Plateanet creó la plataforma virtual, me lo propusieron y me pareció genial.
—¿Extrañas al público?
—Claro, se extraña, pero no cuando haces televisión o cine, por ejemplo, donde no hay público aplaudiendo, y del otro lado está el sonidista, o una cámara, pero si en el teatro, porque estás en contacto. Este viernes 24 voy a hacerle un homenaje a mi madre Ana María Campoy, si bien ella nació un 26 de Julio, las obras las hago los viernes. Voy a leer la última obra que hizo, La importancia de llamarse Wilde, es un texto que me conmueve profundamente.
—¿Por qué crees que en Argentina nos olvidamos de los grandes referentes?
—Mamá está viva porque mucha gente la quiere y porque yo la recuerdo, pero los jóvenes no saben quién es Alfredo Alcón. Somos un pueblo con muy poca instrucción, no es culpa de los jóvenes, es culpa de los maestros, de las carreras, porque no sé si hay alguna materia que por ejemplo homenajee a Niní Marshall, hay mucho Stanislavski pero poco “argentanislavski”.
Es muy triste, no saben quién es Alcón, María Rosa Gallo, o volviendo a Niní, que es como Charles Chaplin, en el mundo saben quién es Chaplin, pero no ella.
Drácula: el recuerdo de un musical que hizo historia a casi 30 años de su estreno
Drácula: el musical, escrito y dirigido por Pepe Cibrián Campoy, con música de Angel Mahler, se estrenó en el año 1991, con Juan Rodó, Cecilia Milone y Paola Krum, entre otros. Una puesta de 2011 se puede ver en la plataforma Teatrix.
—El año que viene se cumplen 30 años del estreno de Drácula ¿qué recordas de esta obra emblemática?
—Recuerdo cuando Tito y Ernestina Lectoure me dijeron sí, se hace, vayamos adelante, fueron ellos, nunca produjeron más que a nadie que a mí durante 10 años. Me cambiaron la vida, el año que viene no se puede hacer porque Ángel Mahler, con derecho, no cede los derechos de la música. Lamentablemente no lo podremos festejar desde ese lugar, pero sí desde otros, porque la obra también es mía y hago lo que se me da la gana. Pero en un punto, que no se haga, ya es de la gente. No hacerla es ayudar a que se vaya a olvido y eso es terrible.
—Entonces tenés pensado hacer algo…
—Sí, claro, no digo que no puedo, montarla no porque no tengo la música y no se puede hacer con cualquier música, tal vez Ángel diga que lo quiere hacer. No sé, yo pienso hacer esto para la gente, está en la historia del teatro, como evento único en la historia del teatro del país, me gustaría disfrutarlo el año que viene como se puede.