Los Valses presentan 2039, un nuevo desafío artístico
La banda conformada en La Plata lanzó una canción inspirada en la obra de un cineasta japonés, y contó con la participación de Lisa Abraham.
Entrevista exclusivaEl director, en pleno rodaje de la película
22/06/2022 - 00:00hs
Adaptando libremente la novela de Iosi Havilio Pequeña flor, la nueva película de Santiago Mitre está protagonizada por Daniel Hendler y Vimala Pons. Abrió el último Bafici y es un viaje hacia las obsesiones de un hombre desempleado. Diario Hoy dialogó con Mitre para saber detalles de su nueva propuesta.
—¿Sos de leer y pensar: “Esto tiene que ser una película”?
—Soy de leer, me gusta mucho leer, y cada vez tengo más trabajo y menos tiempo, pero leer es la actividad que más me gusta, perdón cine (risas). Pero no leo buscando material, la novela de Iosi la leí y estaban los elementos muy cinematográficos: la comedia de re enamoramiento, el suspenso en relación a lo que le sucede al personaje, estaban los asesinatos y el fantástico, que me parecían cosas con potencial explosivas en su combinación y muy cinematográficas. Iosi da talleres de dramaturgia y es una persona con una capacidad de conceptualización muy grande. Me iba a reunir con él por otra cosa y dos días antes leí Pequeña flor, y cuando fui a la reunión no hablé de otra cosa, no de esa otra cosa, sino de Pequeña flor. Le hice casi una entrevista y le dije que avanzaramos con eso. No es que busqué a Pequeña flor, sino que me encontró a mí y lo mismo con Iosi.
—¿Cuál fue el principal desafío en el rodaje? ¿El idioma?
—Era uno de los desafíos, pero me interesaba también trabajar en la película bilingüe. Con la novela de Iosi tomamos la primera decisión de adaptación que fue llevarla a Francia. Por algo del extrañamiento que le sucede al personaje estaba bien que suceda fuera de Argentina y que sea Francia por cierta tradición francesa también. Cuando le conté a Iosi, porque él vivió en Francia, también lo interpeló. Después bueno, es un argentino casado con una francesa y está bien que hablen un poco en castellano y un poco en francés, y cómo se da eso. Como yo no hablo francés, escribí el guión en español con paréntesis que decían “esto es en francés”; pasan meses hasta que él puede entender y se empieza a comunicar, era difícil. El guion después lo trabajé con una traductora y Mariano Llinás sabe un poco de francés, así que algunas cosas las ponía él.