¿Un musical desarrollado en el interior de un baño? ¿Un cuerpo de bailarines compuestos por heces? Sí.
¿Un musical desarrollado en el interior de un baño? ¿Un cuerpo de bailarines compuestos por heces? Sí, la desopilante Teresita, una vida de mierda, volvió a la calle Corrientes de Buenos Aires con su dosis exacta de humor, más humor, y canciones en las que Teresita, su protagonista, entenderá que debe modificar su manera de relacionarse con el sexo opuesto a partir que dos heces le hagan notar sus errores. Diferente, osada, transgresora. Una experiencia única. Los domingos a las 18.30 en el Teatro Picadilly de Buenos Aires, con una increíble Chechu Vargas, y excelsos Mariano Magnífico y Nahuel Adhami.