Lacalle Pou pasará Navidad en el Congo con militares uruguayos

El presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, viajará mañana por la tarde hacia la República del Congo para pasar Nochebuena y Navidad con los efectivos uruguayos desplegados en ese país bajo mandato de la ONU, informó hoy la prensa local.Lacalle Pou, quien estará acompañado por el ministro de Defensa, Javier García, pasará el 24 de diciembre en la base de Goma con el contingente del Ejército y el 25 en Bukavu con los efectivos de la Fuerza Aérea, detallaron medios de Montevideo.

En el Congo hay un total de 800 efectivos del contingente armado del Ejército, incluidos observadores y personal de Naciones Unidas y otros 80 efectivos en el caso de la Fuerza Aérea.Se trata de una visita relámpago, la primera que hace un mandatario a un contingente de cascos azules desplegado en el continente africano.El coronel Gerardo Dattele, jefe militar uruguayo en Congo, explicó los preparativos para recibir a Lacalle Pou el viernes.“Lo que está previsto es que el presidente llegue a Kigali Ruanda), donde lo espera una aeronave de Naciones Unida que lo trasladará a Goma.

Ahí hay un recibimiento protocolar por parte de una autoridad local, luego un proceso de hisopado para estar en condiciones de viajar al día siguiente y se traslada hasta la base, a unos 1.500 metros del aeropuerto, donde hacemos la parte protocolar correspondiente al Batallón de Uruguay”, relató Dattele a radio Uruguay.Para la noche del 24 habrá platos fríos, a excepción de una feijoada -único plato caliente-, cervezas y bebidas colas.A la mañana el mandatario irá en helicóptero a Bukavu, y por la tarde regresará a Kigali para emprender la vuelta a Montevideo.

Las fuerzas uruguayas cumplieron ya 20 años en Congo, porque están desde el inicio de la misión de paz de la ONU, dispuesta tras el fin de la denominada Segunda Guerra del Congo, conocida también como la Guerra del Coltán. Iniciado en 1999, el caótico conflicto involucró a milicias congolesas y a tropas de varios países de la región, y aunque finalizó en 2003, no hubo un vencedor claro y la crisis, la tensión y la hostilidad persisten.