Crearon una esponja para limpiar los vertidos de petróleo en océanos

El experimento fue realizado con éxito en California. Busca ser la clave ante desastres ecológicos

Actualmente, el derrame de petróleo es una de las catástrofes ambientales más peligrosas que existen. Para enfrentar este tipo de desastres, conocidos también como "marea negra", los expertos suelen emplear diversas técnicas que buscan reducir el daño, las cuales dependen, en la mayoría del tiempo, de la zona del accidente, pero que muchas veces no son lo suficientemente eficaz.

Un equipo de científicos desarrolló una esponja para limpiar los vertidos de esta sustancia en aguas abiertas. A través de la técnica síntesis de infiltración secuencial, estos expertos encontraron una forma de  crear una capa extremadamente delgada para unir fuertemente las moléculas para capturar el petróleo. El experimento fue realizado, con mucho éxito, en California, Estados Unidos. 

"Esta tecnología es importante porque, a pesar de las mayores precauciones de la industria, los derrames de petróleo siguen ocurriendo, y los métodos de limpieza existentes son sorprendentemente inadecuados", dijo el co-inventor Seth Darling, director del Instituto de Ingeniería Molecular de Argonne.

Él y un equipo de científicos comenzaron con espuma de poliuretano común, del tipo utilizado en los almohadones de los sillones. Tenían una amplia área de superficie para recoger petróleo derramado y propiedades mecánicas útiles, pero necesitaban una nueva química superficial para unir firmemente las moléculas que absorben el petróleo.

Así, desarrollaron una técnica llamada síntesis de infiltración secuencial. El método de limpieza es simple: la esponja se sumerge en el agua y luego se exprime, el aceite se recoge en contenedores para su posible reutilización o eliminación segura. Después de escurrir el petróleo, puede usarse nuevamente.

Los investigadores querían comprobar si esta esponja era capaz de eliminar el brillo, una capa de aceite que queda perpetuamente en la superficie del agua. Hicieron un conjunto de esponjas para este propósito, desplegándolas para usarlas en un pequeño bote pesquero, que funcionó tal como habían predicho: fue capaz de eliminar con éxito el brillo del aceite de la superficie del agua, sin dejar rastros visibles.