El rompehielos “Almirante Irízar” regresó ayer luego de diez años a la base antártica más austral que tiene la Argentina, la Belgrano 2, como parte del cronograma de aprovisionamiento y relevo de dotaciones en los 13 sitios nacionales en Antártida
El rompehielos “Almirante Irízar” regresó ayer luego de diez años a la base antártica más austral que tiene la Argentina, la Belgrano 2, como parte del cronograma de aprovisionamiento y relevo de dotaciones en los 13 sitios nacionales en Antártida.
Abriéndose camino rompiendo mares helados, el ARA “Almirante Irízar” arribó ayer a la Base Permanente Belgrano 2, la más austral que la Argentina tiene en Antártida, informaron las Fuerzas Armadas.
Después de 10 años, el buque realizó el relevo de personal y material de esta base con el apoyo de dos helicópteros embarcados.
Durante el recambio de la dotación de la base Belgrano 2, compuesta por 19 personas entre militares, científicos y meteorólogos, fueron homenajeados los 44 tripulantes del submarino ARA “San Juan”.
Bajo coordinación del Comando Operacional de las Fuerzas Armadas, dependiente del Estado Mayor Conjunto, la Campaña Antártica de Verano 2017-2018 tiene como objetivo abastecer y relevar personal de las bases Cámara, Decepción, Primavera, Melchior, Carlini, Esperanza, Marambio, Matienzo y Orcadas.
Para efectuar las maniobras de aproximación a todas las bases se despliegan embarcaciones menores entre ellos vehículos anfibios a rueda de la Infantería de Marina; dos lanchas de desembarco de personal y la Corbeta Uruguay y la San Martín.