Empresa tecnológica diseña robot para asistir a científicos en la Antártida

En el próximo verano antártico, una empresa tecnológica desplegará el mejorado prototipo de su innovador Vehículo Terrestre No Tripulado (UGV), denominado “Skúa II”, en las bases antárticas argentinas. Este dron, concebido para facilitar la movilidad segura de los investigadores en el continente blanco, se destaca por su capacidad para colaborar en tareas logísticas y científicas clave.

Bautizado en honor al ave antártica, el “Skúa” se diferencia por su conjunto de sensores diseñados para detectar grietas ocultas bajo la nieve y trazar rutas seguras para los científicos. Además, sus sensores meteorológicos contribuyen al registro de datos científicos en diversas investigaciones. Lo más notable es la incorporación de inteligencia artificial que permitirá al vehículo llevar a cabo de manera autónoma tareas cruciales, como el relevamiento de poblaciones de pingüinos.

El “Skúa II” sucederá al primer prototipo, que fue sometido a pruebas exitosas en las bases antárticas Marambio y Esperanza durante el verano pasado. Con dimensiones ampliadas (2,10 m de largo, 1 m de ancho y 1,70 m de alto) y un peso cercano a los 600 kilos, el nuevo modelo promete una mejora significativa en su desempeño y capacidades.

Según declaraciones de la empresa, el “Skúa” liderará caravanas mientras monitorea la superficie con sus sensores para identificar peligros como grietas ocultas, trazando rutas alternativas seguras en caso necesario. Además de su función logística, los múltiples sensores ambientales del vehículo contribuirán a investigaciones científicas al registrar datos como temperatura y partículas de carbono en el aire.