En varias esquinas
se robaron las tapas metálicas y denunciaron la falta de obras por parte
de la Comuna que encabeza Julio Garro.
Aida tiene más de 60 años. Vive en un edificio de Barrio Norte, a metros de la esquina de 11 y 38. Usa un bastón para movilizarse, y cada vez que quiere cruzarse a la feria para hacer los mandados tiene que pasar por una verdadera odisea.
Carlos vive en La Loma, sobre diagonal 76, hace varias semanas viene sufriendo por una boca de alcantarilla que quedó al aire libre, luego de que se la llevaran los ladrones en el cruce de la calle 42.
María Inés es de Los Hornos, y a metros del cruce de 55 y 154 sufre lo mismo en la zona Oeste de la ciudad.
Carlos se radicó en la zona del estadio de Estudiantes. Desde hace algunos años vive en el quinto piso de un departamento de la avenida 1, entre 56 y 57. A pesar de sus más de 70 años, a diario suele salir a realizar tareas físicas en la zona del Bosque. Y es en ese momento cuando también tiene que sortear obstáculos, por el estado de las veredas y las bocas de tormenta sobre el cordón de 1.
A todos los ellos los une la misma inquietud: no poder caminar relajados o dispersos, por temor a caerse, trastabillarse y lastimarse ante la falta de obras para mejorar el estado de las veredas y las calles por parte del Municipio platense.
Desde hace un año, cuando se reanudó la circulación vehicular y peatonal tras las restricciones que se habían fijado por la pandemia, el robo de tapas metálicas y bocas de alcantarillas viene afectando sensiblemente a los vecinos de la ciudad.
Si bien está previsto un mantenimiento y reparación de algunas veredas antes de fin de año, un problema “de partes” interfiere contra la solución: para la empresa encargada de suministrar el agua (ABSA), las veredas rotas por las pérdidas representan un problema que tiene que solucionar la Secretaría de Obras del Municipio. En cambio, para la Secretaría de Obras de la Comuna platense, es potestad de ABSA reponer las tapas metálicas del sistema de desagüe que fueron robadas oportunamente, más allá de aportar las cámaras de seguridad y colaborar en la investigación por el faltante de este tipo de estructuras que afecta la circulación de las personas por las calles.
Una laguna a metros de plaza Italia
Una familia que vive en calle 6 entre 44 y 45 demostró que hace al menos cuatro días no puede salir de su casa sin mojarse, debido a una enorme pérdida de agua que ganó toda la vereda y que dificulta el paso de las personas que van hacia la zona de los bancos viniendo desde 44 en dirección hacia el centro.
La pérdida está a la vista de todos, proviene de un caño subterráneo de la vereda y, según expresaron en el lugar, “se hicieron más de dos reclamos para poder solucionar este problema”.
Al tratarse de una zona muy transitada, representa un verdadero peligro a metros de plaza Italia, una de las más concurridas y visitadas que tiene La Plata, por la llegada de personas que vienen de otras ciudades desde la Estación de Trenes o la Terminal de Ómnibus.