Pablo Picasso y los amores de su vida
Durante sus 92 años tuvo muchas relaciones con mujeres que influyeron fuertemente en las distintas etapas de su pintura.
CulturaDurante sus 92 años tuvo muchas relaciones con mujeres que influyeron fuertemente en las distintas etapas de su pintura.
17/05/2021 - 00:00hs
Amélie Lang se había casado embarazada a los 18 años. La criatura no llegó a nacer y el matrimonio naufragó muy pronto. Se escapó de su casa. Para no ser encontrada, se cambió el nombre por el de Fernande Olivier. Tenía 23 años cuando conoció en París a Picasso. Vivieron en el barrio de Montmartre siete años tempestuosos. Se la puede reconocer en el retrato Fernande con mantilla negra , y en algunas esculturas, por ejemplo, la Cabeza de una mujer (Fernande). Al conocerla, Picasso inició el llamado “Período rosa”, que abarca un ciclo de más de 50 obras. Olivier tuvo una vida tan intensa y misteriosa que incluso ha sido novelada por la escritora Isabel-Clara Simó.
Pablo Picasso parecía tener especial debilidad por las mujeres que cambiaban de nombre. Marcelle Humbert quiso llamarse Eva Gouel, y así la conoció el pintor cuando aún vivía en pareja con Fernande Olivier. Ella los frecuentaba como amiga de ambos.
Picasso la llamaba “Ma Jolie” (mi bonita), por una canción francesa de moda en esos años, y así la llamó en alguno de sus cuadros cubistas. Eva tenía 30 años cuando murió de tuberculosis. El infierno es el título de una obra de Picasso de ese entonces, que retrata su estado de ánimo tal como lo describe en una carta escrita en esos momentos a Gertrude Stein: “Mi vida es un infierno”.
La enamorada que vivió en Argentina
Otra de las mujeres que enamoró a Picasso, quizás por tomar la decisión de cambiar su nombre, fue Dora Marr. Ella había nacido el 22 de noviembre de 1907 con el nombre de Henriette Theodora Markovitch. Dora vivió en Argentina desde los 3 hasta los 23 años. Según Pablo Picasso, esa mujer, de la que estuvo enamorado durante los años de la guerra civil española y la ocupación de Francia, “hablaba con argentinismos”.
Ella había estudiado con uno de los mayores fotógrafos del siglo XX, Henri Cartier-Bresson. Dora fotografió todo el proceso de composición de una de las obras mayores de Pablo Picasso: el Guernica. En 1945, a Pablo Picasso ya no le interesaba Dora, y ella empezó a comportarse de manera extraña, llegando a pasearse desnuda por las escaleras del edificio en el que vivían.
Fue paciente de Jacques Lacán, e ingresó en un hospital psiquiátrico. Paul Éluard, quien era el mejor amigo de Dora por aquellos años, le pidió a Picasso que la rescatara de ese estado de agonía al que la condenaban los electroshocks. El silencio de Picasso erosionó la relación entre ambos artistas. Maar ha pasado a la historia por ser La mujer que llora, en la serie homónima del pintor español; en la que utilizó colores estridentes como el rojo, el amarillo, el azul, el naranja, el verde o el marrón.
En la primavera de 1943, Pablo Picasso tenía 61 años y Françoise Gilot, 21. Ambos eran amigos de Henri Matisse. Se enamoraron de inmediato. No se casaron pero tuvieron dos hijos -Claude y Paloma-. La relación se prolongó durante diez años. En 1964, 11 años después de su separación, Gilot escribió Vida con Picasso, un libro que vendió más de un millón de copias en docenas de lenguas, a pesar de las fracasadas acciones legales de Picasso para tratar de impedir su publicación. A partir de entonces, Picasso no volvió a ver nunca más ni a Claude ni a Paloma.
Françoise Gilot, a sus 98 años, aún sigue ejerciendo como crítica de arte.
El ballet Parade
Olga Stepánovna Jojlova era bailarina de la compañía Ballets Rusos cuando conoció en Roma a Pablo Picasso, quien había ido a presenciar una representación del ballet Parade. Al año siguiente -en 1918-, contrajeron matrimonio (primero, por civil; luego, bajo el rito ortodoxo) y tres años después nacería su hijo -Paulo-, quien aparecería en varias obras: Paulo dibujando, de 1923, Paulo vestido de Arlequín, de 1924, y Paulo vestido de Pierrot, de 1925.
Según Marina Loshak, directora del Museo Pushkin de Moscú: “Fue un periodo muy importante en la vida de Picasso. Extremadamente importante. Se podría llamar el tiempo de Olga”. Por su parte, Olga dejó escrito: “Soporté al genio con cariño durante más de doce años, fui legalmente su primera esposa y, como a casi todas, me abandonó”.
En enero de 1927, Picasso conoce a Marie-Thérèse Walter. Ella tenía 17 años; él, 46. Se conocieron en las Galeries Lafayette de París. Durante ocho años ella fue su amante y modelo. Vivían en un castillo en Boisgeloup, cerca de Gisors, en Normandía, que Picasso utilizaba como estudio de esculturas, principalmente. La hija de ambos, Maya, nació el 5 de septiembre de 1935, el mismo año en que la pareja se separó. Ese año, el pintor conoció en el mítico café Deux Magots, a Dora Marr, una fotógrafa que tenía gran prestigio entre los surrealistas.