Aunque la UNLP posee un programa de inclusión para personas con discapacidades no dio respuesta a los pedidos de esta alumna.
Enterada del programa de inclusión de la UNLP, llena de ilusión por empezar una nueva etapa en su vida, una joven con hipoacusia recién egresada del secundario se decidió por estudiar la carrera de Contador Público en la universidad de nuestra ciudad. A pesar de haber tomado los pasos correspondientes, de presentar toda la documentación que avale su estado como discapacitada y de contar con el apoyo de los directivos, el intérprete en lenguaje de señas que la ayudaría a participar de las clases y entender a sus profesores nunca arribó.
El Diario Hoy entrevistará a esta chica durante la tarde y tomará nota del calvario que significa no poder insertarse en el mundo educacional por sufrir una discapacidad. El abandono por parte de las autoridades universitarias le costó el año de cursadas, tuvo que dejar la carrera por no poder escuchar las clases.
Este medio junto con la Red92 tomará su testimonio para denunciar la no democratización al acceso a la educación que se vive hoy en día en la ciudad.