Proyectan reformas para la rotonda de 7 y 32

Se analiza modificar el accidentado acceso a la ciudad. Tendría la fuente al nivel del suelo y no contaría con rejas laterales. Buscan que además sea un paso peatonal más seguro 

Transformar la rotonda de 7 y 32 en un distribuidor vehicular de mayor seguridad para conductores y peatones. Ese es el nuevo proyecto de obra planteado por el Municipio tras los numerosos accidentes sufridos en el lugar. En ese marco, avanza el proyecto de reforma estructural, que incluye una nueva fuente al nivel del suelo. 

Al respecto, el secretario de Planea­miento Urbano y Desarrollo Económico, Gabriel Rouillet, explicó: “Estamos hablando de un acceso muy importante y con una gran circulación, por eso es necesario lograr que se vea lo menos obstaculizado posible”. Además, agregó que “el objetivo es generar un espacio que funcione realmente como distribuidor vehicular, pero que también sea una zona de circulación peatonal mucho más segura”, y detalló: “Estudiamos quitar las rejas, incorporar bolardos (postes bajos) y mejorar la iluminación; todo acompañado de una buena señalización”.

Se informó que el proyecto incluirá también una fuente más moderna, con un chorro de agua de altura y menos necesidad de mantenimiento. Además, se planea mantener las palmeras, ya que son un emblema de la época fundacional de la ciudad. 

Los accidentes que impulsan las modificaciones

“Por otro lado, la mayoría de los casos de accidentes fueron a causa de excesos de velocidad, con lo cual, además de las obras, estamos trabajando en el control y la concientización, en conjunto con otras áreas del Municipio que trabajan en la prevención por fuera de las obras”, explicó Rouillet.

El 1º de septiembre de 2015, un Ford Fiesta blanco derribó las rejas del distribuidor y quedó colgando del borde de la fuente. El 29 de marzo de 2015, un Renault Clio terminó en el agua tras una violenta maniobra que hizo a su conductor acreedor de una multa. 

A principios de julio de este año, un Chevrolet Corsa se metió completamente en la fuente. El conductor explicó que no había tomado alcohol, y que había perdido el control de su automóvil a causa de la lluvia.  Semanas después ocurrió lo mismo con un Chevrolet Celta Gris, y luego un Renault Megane.

El último episodio fue el más trágico: el 4 de octubre, el exyerno de Estela de Carlotto murió cuando el auto que conducía cayó en la fuente, que no tenía agua.