Con entrada libre y gratuita, el Club Corazones Unidos se prepara para llevar a cabo una exposición de coleccionistas y hobbies.
El sábado 21 y el domingo 22 de mayo, en la sede del Club Corazones Unidos de Tolosa, se realizará una gran exposición de coleccionistas y hobbies. Desde las 10 y hasta las 20, con entrada libre y gratuita, se reunirán más de 20 expositores que lucirán orgullosamente sus colecciones vinculadas a la numismática, la notafilia, la filatelia, la glucofilia y la medallística. También habrá lugar para los acopios dedicados a postales, juguetes, antigüedades, posavasos y un largo etcétera.
“Estos encuentros surgen por la pasión de cada coleccionista”, dijo Gustavo Rubens Espósito, presidente del club y reconocido numismático de nuestra ciudad. “El clima es fervoroso y todos están ansiosos por mostrar su ultimo tesoro”. Entre los expositores, ya se encuentran confirmados nombres del coleccionismo local como Marcos Blanc, Graciela Carballo, Mariela Rodriguez Vaz, Gloria Debaemdeker, Juan Grecco y el propio Espósito. De esta manera, entre estampillas de todas las épocas y lugares o sobrecitos de azúcar de los cinco continentes, entre billetes antiguos y objetos de nuestro pasado inmediato o más lejano, se darán cita los hobbies y pasiones en las instalaciones tolosanas ubicadas en calle 4, entre 521 y 522.
“Mi comienzo se da por casualidad”, comentó Espósito, uruguayo de nacimiento. “Cuando tenía solo cuatro años mi abuelo materno me llevaba al bar, en el puerto de Montevideo. Ahí los marineros me daban monedas para una gaseosa. Claro, eran monedas griegas, italianas, españolas, etc. No me servían para comprar, entonces las empecé a guardar. Al principio, las separaba por país solamente. Fui creciendo yo y fue creciendo conmigo la pasión por la numismática, por las medallas históricas, por la notafilia, etc. Ya estando en Argentina comencé a investigar y a clasificar por año, por país, por continente. Trate de darle prioridad a Uruguay, Argentina, Brasil, pero después la colección alcanzó rango mundial”, remarcó.
Poco a poco, mientras organizaba sus colecciones en carpetas con hojas tipo folios divididas por temáticas, Espósito se fue vinculando a distintos grupos de coleccionistas e intercambios. Allí expandió los alcances de su afición, aunque el verdadero salto se produjo algunos años más tarde con el desembarco de internet. “El despegue grande vino de la mano de la tecnología”, contó Espósito, y añadió: “Ahí logre conseguir piezas que eran difíciles, no por escasas sino porque a través de cartas y sin traductores era imposible realizar un intercambio con un coreano, por ejemplo”.
Llevó su pasión por el coleccionismo hacia territorios menos usuales, como las tarjetas telefónicas, las tarjetas comerciales o bancarias, las tarjetas de transportes e incluso las llaves de hotel. Sin embargo, en el centro de su afición, todo parece girar alrededor de las monedas. “La numismática te da una perspectiva de cada civilización”, apuntó. “De cómo y qué cosas vivieron, de los momentos de grandes avances y de las grandes crisis. Lo medallístico, a su vez, te enseña a valorar y recordar los hitos históricos”, explicó.
En ese sentido, metabolizó todas esas enseñanzas aprehendidas del coleccionismo y se lanzó al quehacer de su pasión. Así, como parte de las celebraciones por el 150º aniversario de Tolosa, el numismático se animó a acuñar una medalla conmemorativa para la ocasión. “También hice la medalla del 34º aniversario del Club Corazones Unidos, algunas de Uruguay y, un tiempo atrás, hice la del 40º aniversario de la Fiesta Provincial del Inmigrante de Berisso”, concluyó.